Un grupo de personas que se identifican como miembros de Proud Boys, un grupo de extrema derecha, salen de un tribunal, el 30 de agosto de 2023, en Washington, donde se lleva el juicio a algunos de sus líderes por el asalto al Capitolio de EEUU en enero de 2021. (Foto AP/Jacquelyn Martin)
Washington,.- La Justicia estadounidense condenó este jueves a 17 y 15 años de prisión a dos cabecillas del grupo ultraderechista Proud Boys, Joseph Biggs y Zachary Rehl, por el asalto al Capitolio de enero de 2021.
Biggs y Rehl formaban parte del llamado “Ministerio de Autodefensa” de los Proud Boys, a través del cual establecieron una cadena de mando, reclutaron a miembros y planearon cómo ejecutar el ataque al Capitolio, según detalló el Departamento de Justicia en un comunicado. Rehl, Biggs, Ethan Nordean y el líder de los Proud Boys, Enrique Tarrio, de origen cubano, fueron hallados culpables en mayo de conspirar para cometer sedición. La fiscalía había solicitado contra Rehl 30 años de cárcel y 33 contra Biggs.
El Departamento de Justicia consideró este jueves que “lideraron y participaron en todas las irrupciones importantes en el edificio del Capitolio el 6 de enero. Otro acusado junto a ellos, Dominic Pezzola, se libró en mayo del cargo de sedición, pero fue declarado culpable de asalto, resistencia a un agente de la autoridad y robo de bienes gubernamentales.
La declaración de culpabilidad llegó entonces después de una semana de deliberaciones en un tribunal federal de Washington. Rehl era el presidente de los Proud Boys en Filadelfia. Según el diario local The Philadelphia Inquirer, lloró este jueves al conocer la sentencia, pidió perdón a su familia y afirmó que ya no quiere tener nada más que ver con la política. “Ya he terminado con todo esto. Ya no más vender mentiras para otras personas que no se preocupan por mí”, señaló.
A lo largo del proceso, los fiscales mostraron mensajes y vídeos publicados por los propios acusados y otros miembros del grupo, que llamaban a la violencia y a la revolución contra el cambio en la presidencia. Según la acusación, los mensajes hablaban sobre la necesidad de la “guerra”, la “revolución” y el fusilamiento de traidores.
El día del asalto, relató el Departamento de Justicia, Rehl roció a un agente de policía con gas pimienta en la cara y Pezzola rompió una de las ventanas del edificio, lo que permitió que varias personas entraran al recinto, entre ellas Biggs. Junto con otros integrantes de los Proud Boys, detalló el comunicado, Biggs y Rehl publicaron varios videos en redes sociales celebrando el asalto, al que calificaron de “histórico». La audiencia sobre la condena de Nordean está programada este viernes a las 14.00 hora local (18.00 GMT) y el martes a las 14.00 está previsto que se conozca la de Tarrio.
El juez de distrito Timothy Kelly dijo este jueves que la Constitución da a los ciudadanos “muchos importantes derechos por los que los estadounidenses han luchado y muerto”, y subrayó, según la CNN, que los acontecimientos del 6 de enero “rompieron la tradición de una transferencia pacífica de poder».
Ese día unas 10.000 personas -la mayoría simpatizantes de Trump- marcharon hacia el Capitolio y unas 800 irrumpieron en el edificio mientras se certificaba la victoria electoral de Biden en los comicios de 2020. Hubo cinco muertos y cerca de 140 agentes heridos.
El propio Trump está imputado en Washington por los intentos para revertir el resultado de los comicios en 2020. Es uno de los cuatro casos penales en su contra y en todos ellos se ha declarado no culpable, la última vez este jueves en Georgia por intentar falsear el resultado de las presidenciales en ese estado