Arsenio Hernández Fortuna.
Desde diversas instituciones y personalidades han publicado pronunciamientos a favor de un programa mínimo de gobierno que unifique la oposición al régimen peledeísta, para garantizar que el próximo cambio político no sea solo de partido y presidente.
Es obvio que la sociedad dominicana necesita hoy, más que nunca, un Congreso Nacional independiente y un Poder Judicial que funcione efectivamente para evitar el abuso con los recursos del Estado y someter a los funcionarios corruptos, pasados, presentes y futuros. Solo así se recuperaría buena parte del dinero desfalcado, necesario para evitar nuevos préstamos públicos e impuestos abusivos.
También es imprescindible trazar una política económica que tienda a la redistribución de las riquezas producidas y naturales, la reducción de la desigualdad social, mediante la creación de más puestos de trabajo productivo y la elevación de los ingresos de los que menos ganan; específicamente con un sueldo mínimo de 25,000 pesos, que cubra el costo de la canasta familiar y el pago mensual de una vivienda económica, entre otras reivindicaciones.
El Frente Amplio ha planteado al Partido Revolucionario Moderno y otras organizaciones que ese programa mínimo puede estar sintetizado en los lineamientos básicos para un gobierno de regeneración nacional que ha planteado la Coalición Democrática, de manera que pueda ser aceptado por muchos, sin sectarismo.
Particularmente, hemos insistido desde hace mucho tiempo en hacer diversos planteamientos a favor de un programa mínimo de gobierno que pueda ser aceptado por diversos sectores progresistas y democráticos, respetando las particularidades de cada uno (almomento.net/propuestas-para-transformar-la-sociedad/, https://eldia.com.do/propuestas-para-transformar-la-sociedad/).
Además, en Montecristi trabajamos en un proyecto municipal de varios partidos (Frente Amplio, AP, APD, D x C, PRSD) para introducir cambios sensibles en el Ayuntamiento local, que pongan sus recursos a favor del desarrollo de la ciudad, especialmente de los ciudadanos más necesitado. Igualmente, extendemos esa propuesta de transformación hacia el ámbito provincial, con la candidatura a diputado que ostentamos por el Frente Amplio y otras organizaciones.
Es claro que un programa mínimo de gobierno orientará a quienes votarán en febrero y mayo de 2020 hacia posiciones políticas de avanzada, dejando a un lado el pretendido reciclaje de antiguos dirigentes peledeístas y reformistas.
