¿Es posible que un escándalo que provocó el juicio político a la expresidenta de Corea del Sur haya empezado por un cachorro?
Según un testimonio que dio ante el Parlamento uno de los involucrados en la trama, sí.
El exesgrimista Ko Young-tae reveló cómo una discusión por los cuidados de un perro lo motivó a revelar información a la prensa que eventualmente llevó al juicio político a la presidenta Park Geun-hye.
Ko está vinculado directamente con Choi Soon-sil, de 60 años, la confidente de la expresidenta que se enfrenta a cargos de corrupción y conflictos de interés.
Choi fue acusada de usar su amistad con la mandataria para inmiscuirse en la política nacional y solicitar donaciones de empresas.
Y la presidenta fue acusada de abuso de poder y violaciones constitucionales.Luego de un proceso judicial que duró más de 10 meses, este viernes fue condenada a 24 años de cárcel.
A Park, de 66 años, también le impusieron multas por el orden de 18.000 millones de wones (unos US$17 millones), al final de un proceso judicial que duró más de 10 meses.
Todo comenzó en 2014, cuando Choi le pidió a Ko que cuidara al cachorro de su hija.
Una pelea «muy grande»
El hombre se llevó al perro a su casa pero salió a jugar una ronda de golf, lo que enfureció a Choi, quien lo acusó de haber abandonado al animal.
«Tuvimos una pelea muy grande», dijo Ko en la declaración que dio al comité parlamentario que investiga a la presidenta.
A partir de entonces su relación fue cuesta abajo. «Me trató como un esclavo, maldiciéndome en muchas ocasiones«, señaló.
Herido y molesto, Ko decidió acudir a la prensa para detallar los intríngulis de la relación entre la ahora expresidenta Park y Choi.
Durante meses, recolectó evidencia de la injerencia de Choi sobre el gobierno de Park, con material de video que mostraba a Choi tratando a aliados presidenciales como sus asistentes personales.
Ko participó después en una entrevista de televisión en la que dijo que la «actividad favorita» de Choi era editar los discursos de la presidenta.
Los reporteros buscaron evidencia para respaldar su alegato y obtuvieron una tablet que contenía autorretratos de Choi y archivos de discursos presidenciales.
Park admitió después que le dio acceso inapropiado a Choi a asuntos gubernamentales, incluidos sus discursos, y se disculpó.
La mandataria negó, sin embargo, las acusaciones de corrupción de la fiscalía.
Pero, ¿cómo obtuvo este personaje un acceso tan directo a las involucradas en el mayor escándalo del país?
Vistiendo a la presidenta
Según Ko, su relación con la empresaria Choi Soon-sil comenzó en 2012, poco después de que Park fuese electa como presidenta.
El negocio de Ko en ese entonces consistía en administrar una compañía de carteras y ropa llamada Villomillo.
Un día un amigo le pidió que le mostrara algunos de los productos de la marca a un comprador misterioso.
«Ahí fue cuando vi a Choi por primera vez», dijo en su declaración pública esta semana.
A Choi le gustaron las prendas y Ko comenzó a suministrarle artículos que acababan en el armario de la expresidenta Park.
Le entregó cerca de 40 bolsos de lujo hechos con piel de cocodrilo y de avestruz, y 100 prendas hechas a la medida de la mandataria.
Costaron decenas de miles de dólares, y Choi pagó todo de su propio bolsillo, según Ko.
Sobre la pregunta de si mantenía una relación sentimental con Choi, Ko respondió que solo eran amigos.
Como el modisto no oficial de Park, comenzó a disfrutar de una creciente fama, especialmente después de que se vio a la presidenta llevando una cartera de Villomillo en 2013, según reportes de medios locales.
La información que dio Ko, junto a otras revelaciones sobre los sospechosos negocios de Choi, desataron indignación pública.
Esto provocó una investigación de gran alcance que ya ha expuesto a ejecutivos de corporaciones y celebridades.
Cuando le preguntaron en el Parlamento a Ko si temía oponerse a Choi, la mano derecha de la presidenta, respondió «no».
«Estaba molesto y nunca pensé en eso», declaró. «No me arrepiento».
(*) Este artículo se publicó originalmente en diciembre de 2016, cuando el parlamento de Corea del Sur votó para llevar a juicio político a Park Guen Hye y fue actualizado con la condena en su contra.