Código Penal se encamina a superar aprobaciones fallidas
Santo Domingo.-El Código Penal de República Dominicana, la ley que define y agrupa los delitos y penas, ha sido objeto de numerosos intentos de modernización en las últimas décadas.
La razón principal de esta reforma es que el actual código, con raíces en 1844, se considera desactualizado ante la evolución de la criminalidad y los nuevos tipos de delitos.
El legislador se ha visto obligado a aprobar leyes complementarias para suplir estas deficiencias y proporcionar a los jueces las herramientas necesarias para dictar sentencias justas.
Sin embargo, la modificación del Código Penal ha sido un proceso complejo, influenciado por debates técnicos, sociales y políticos.
Como explica el jurista Carlos Salcedo: “Un código es producto de un trabajo técnico depurado; socialmente acogido y políticamente deliberado, pero ante todo resulta de la prudencia”.
Desde el segundo gobierno de Leonel Fernández (2004-2008) se iniciaron los debates para actualizar el Código Penal bajo el argumento de que su versión original ya no respondía a las necesidades de la justicia moderna.
En el año 2006, el Congreso aprobó una reforma, pero el entonces presidente Fernández la devolvió alegando incongruencias con el Código Procesal Penal.
Más adelante, bajo la gestión de Danilo Medina, se aprobó una nueva versión del proyecto Código Penal, pero esta vez el mandatario observó la pieza debido a la controversia sobre la interrupción del embarazo.
El tema ha sido motivo de grandes debates en la sociedad, con grupos pro y antiabortistas presionando a los legisladores en torno a la despenalización en casos de violación, incesto o peligro para la vida de la madre.
El pasado cuatrienio, el Código Penal se mantuvo en el centro del debate legislativo.
En más de una ocasión, ambas cámaras del Congreso lo aprobaron, lo que generó expectativas sobre su promulgación.
Sin embargo, la ley nunca llegó al Poder Ejecutivo, quedando archivada en la Cámara de Diputados.
Nueva esperanza
— Aprobación
A pesar de los intentos fallidos de las últimas dos décadas, la creación de una nueva comisión bicameral reaviva las esperanzas de una actualización del Código Penal. Algunos legisladores aseguran que pronto será aprobado.
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