Santo Domingo.- En la República Dominicana existe un «marcado racismo» practicado por instituciones y ciudadanos, afirmó hoy la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH-RD), a propósito de la celebración del «Día internacional del migrante».
«A nosotros (los dominicanos), más que a nadie, debería resultar fácil entender, comprender y amar a los migrantes, porque nuestros antepasados, españoles, taínos (indígenas) y africanos eran migrantes», precisó el presidente de la comisión, Manuel María Mercedes, en un documento.
Para apuntalar su aseveración, Mercedes recordó que hace pocos días, la prensa local reportó un incidente en el que una mujer dominicana fue supuestamente confundida con una inmigrante ilegal haitiana y estuvo a punto de ser deportada hacia Haití.
«Episodios como este son inaceptables, más aun cuando provienen de autoridades que deben actuar bajo el respeto de los estándares internacionales en materia de deportaciones de extranjeros en situación migratoria irregular, lo que evidencia un cierto racismo estructural, lamentable herencia de la dictadura de Rafael Trujillo», agregó.
Mercedes también recordó la paliza que hace meses recibió en el país el abogado Genaro Rincón, un activista de los derechos humanos, así como el ataque, más recientemente, perpetrado por desconocidos contra la oficina de la también letrada Noemí Méndez, otra conocida defensora de los derechos humanos.
«Pedimos a las autoridades competentes que esclarezcan todos estos hechos con la debida urgencia y seriedad, al tiempo de que formulen medidas para proteger a los migrantes y las y los defensores de sus derechos humanos, enviando claros mensajes a la población de condena y repudio de cada hecho o episodio de intolerancia y racismo», agregó el presidente de la comisión.
El activista recordó los «sacrificios» de los miles de hombres y mujeres que cruzan la frontera desde Haití hacia territorio dominicano, así como dijo saludar la llegada de «tantos hermanos venezolanos» en los últimos años al país.
«Condenamos enérgicamente episodios de racismo y de intolerancia tanto de individuos particulares como de las autoridades frente a cualquier ser humano que se encuentre en condición de migrante, así como condenamos y hemos condenado en el pasado los abusos cometidos hacia nuestros connacionales en otros países», expresó Mercedes.