Washington.- Cinco personas fueron detenidas y dos agentes de Policía resultaron heridos, uno de ellos al recibir un botellazo en la cabeza, por los altercados entre defensores y detractores del aspirante a la Presidencia de Estados Unidos Donald Trump en Chicago que le llevaron a posponer su mitin.
En una rueda de prensa a última hora del viernes, el superintendente de la Policía de Chicago, John Escalante, informó de las cinco detenciones- dos llevadas a cabo por la Policía de Chicago y otras dos por los agentes del campus de la Universidad de Illinois (donde iba a celebrarse el acto).
La quinta detención fue la del periodista de CBS News Sopan Deb, quien fue arrestado por motivos que todavía se desconocen por la Policía estatal de Illinois.
Dos agentes de Policía resultaron heridos, aunque no de gravedad, uno de ellos al recibir un botellazo en la cabeza. Trump se vio hoy obligado a posponer un mitin en Chicago y trasladarlo a otra fecha al producirse episodios de violencia por la presencia de centenares de manifestantes.
Las cámaras de televisión de los principales canales del país mostraron imágenes de enfrentamientos violentos entre detractores y partidarios del candidato tanto dentro del Pabellón Chicago de la Universidad de Illinois (donde iba a celebrarse el evento), como fuera del local.
“Tras un encuentro con agentes de la ley, Trump ha determinado que por la seguridad de los cientos de miles de personas reunidas dentro y a las afueras del pabellón, el mitin de hoy se pospondrá a otra fecha. Muchas gracias por su presencia y por favor márchense en paz”, indicó en un comunicado la campaña del magnate.
Mientras una gran concentración de gente rodeaba el recinto, dentro de él los manifestantes gritaban “Que le den a Trump” y «¡Bernie, Bernie!”, en referencia al aspirante del bando demócrata Bernie Sanders. Uno de los manifestantes llegó a subirse al atril desde el que tenía que hablar Trump, ante lo que los responsables de seguridad trataron de reducirle y bajarle del estrado.
Tras haberse anunciado la cancelación temporal del evento, Trump habló para las principales cadenas de televisión nacionales, donde lamentó que la libertad de expresión, un derecho recogido por la Constitución de EE.UU., fue “violado” y que el país está tan dividido y furioso que “ya no se pueden ni celebrar mítines».
Además, el magnate aseguró que hay que “recuperar empleos para la gente” para así poner fin a la violencia. Por su parte, sus rivales en la contienda republicana también reaccionaron a lo ocurrido, y el senador Ted Cruz tildó los hechos de “consecuencia predecible” de la retórica de Trump y de sus posicionamientos con respecto a los manifestantes.
El senador Marco Rubio emitió un comunicado en el que vinculó lo sucedido a la “división creada durante ocho años” por el presidente Barack Obama entre “los que tienen y los que no, líneas raciales y étnicas y líneas de género para ganar elecciones».
Rubio también criticó que se privase a Trump de su libertad de expresión y acusó a “la izquierda” de tener la convicción de que “si no te gusta lo que alguien dice, tienes derecho a hacerlo callar, como ocurre en muchos campus universitarios a lo largo y ancho de Estados Unidos».
Las protestas por el mitin del precandidato presidencial habían sido organizadas desde hace días por una coalición de activistas, estudiantes, religiosos y políticos de la ciudad, entre ellos numerosas organizaciones latinas y afroamericanas.
La tensión ha ido creciendo durante los últimos días en los mítines de Trump y en uno de ellos el miércoles, en Carolina del Norte, uno de los asistentes propinó un puñetazo a un manifestante negro después de que este interrumpiera el evento a gritos.