José Báez Guerrero
Persiste el horror del ministro asesinado cuando un capitoste hecho senador ofrece “repartir palos” al otro ministro del edificio porque “no resuelve” algo de Obras Públicas.
Las desfachatadas truculencias de Antonio Marte merecen respuesta del Ministerio Público y del Senado.
Son amenazas de muerte (difícilmente se sobrevive tunda por turba). Este turpén comanda una mafia como presidente de CONATRA, que agrupa 42 federaciones con 1,776 pseudo-sindicatos o empresas de transporte urbano, interurbano, taxis y turísticas, con más de 152,000 afiliados. Es hotelero en Bonao. Preside la cooperativa de choferes COOPNAEMTRA, sigla similar a sus neuronas.
Dirige el movimiento “Primero La Gente” y representa a Santiago Rodríguez por el PRSC y aliados. ¿Cómo toleran fiscales, autoridades y el país a semejante patán con ínfulas de geniecillo como Pinky o el terrorífico Chucky? Con patrimonio mal contado de casi RD$150 millones, Marte dice que los senadores “pasan hambre” porque sólo hay almuerzo cuando sesionan y nunca ofrecen “como en casa, ñame con bacalao”. ¿Se ocupará la Procuraduría de este patriota? Su peligrosa impunidad daña al Gobierno.
