El Gobierno de China anunció la suspensión, por un periodo de un año, de las medidas de control a la exportación que había impuesto sobre materiales estratégicos como las tierras raras, componentes de baterías de litio y diamantes sintéticos industriales.
Según el Ministerio de Comercio chino, la medida entra en vigor de inmediato y estará vigente hasta el 10 de noviembre de 2026. Esta decisión llega después del encuentro entre los presidentes Xi Jinping y Donald Trump en Busan (Corea del Sur), donde ambos líderes alcanzaron acuerdos destinados a reducir tensiones comerciales y rebajar aranceles mutuos.
Entre las disposiciones suspendidas figuraban normas que obligaban a las empresas extranjeras a solicitar licencias especiales si utilizaban materiales o tecnología de origen chino, incluso fuera del territorio del país. Estas restricciones habían sido uno de los puntos más conflictivos en la guerra comercial entre ambas potencias.
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El acuerdo alcanzado prevé una relajación de las tarifas durante los próximos doce meses. Pekín, por su parte, retirará un arancel adicional del 24% a productos estadounidenses y eliminará medidas “antidumping” sobre algunas fibras ópticas, mientras que Washington reducirá sus gravámenes medios a bienes chinos del 57% al 47%.
El anuncio coincide con un repunte del 75% en las exportaciones chinas de tierras raras entre septiembre y octubre, tras varios meses de caída por las restricciones previas. China mantiene su dominio en el procesamiento de estos minerales esenciales para la producción de vehículos eléctricos, turbinas eólicas y chips de alta tecnología.
