Las encuestas pronosticaban la victoria del expresidente Sebastián Piñera, pero la elección se rodeó de incertidumbre después de que el multimillonario empresario logró menos votos de los esperados en la primera ronda en noviembre.
SANTIAGO DE CHILE. – Los votantes chilenos decidirán el domingo entre hacer virar al mayor productor de cobre del mundo hacia la derecha o mantenerse en el centroizquierda en un muy disputado balotaje de las elecciones presidenciales.
Las encuestas pronosticaban la victoria del expresidente Sebastián Piñera, pero la elección se rodeó de incertidumbre después de que el multimillonario empresario logró menos votos de los esperados en la primera ronda en noviembre.
Se medirá al periodista y senador de centroizquierda Alejandro Guillier, impulsado por el respaldo de la extrema izquierda chilena.
Chile se resintió por la bajada del precio y de la demanda internacional del cobre, que vertebra su economía.
La desaceleración económica y el descontento de los chilenos porque la presidenta Michelle Bachelet no cumplió sus promesas de profundos cambios sociales en el empleo y la educación ayudaron inicialmente a Piñera, que terminó su mandato (2010-2014) con un índice de aprobación najo.
Las encuestas electorales están prohibidas en el país en las semanas previas a los comicios, pero los analistas dicen que la carrera electoral parece estar abierta. Piñera, de 68 años, ganó la primera ronda con el 36% de los sufragios.
Propone rebajar los impuestos a las empresas para reactivar el crecimiento. Además promete lanzar un plan de gasto de 14.000 millones de dólares en cuatro años que incluyen nuevas inversiones en infraestructuras.
El empresario, educado en Harvard, podría beneficiarse de la baja participación ya que votar dejó de ser obligatorio en 2012. Guillier, de 64 años, recibió el respaldo del 22% del electorado en noviembre.
Promete dar continuidad al plan de Bachelet de subir los impuestos a las corporaciones para financiar en parte la reforma educativa, reformar la Constitución y mejorar el sistema de pensiones y el sanitario.
También quiere diversificar la economía chilena y desarrollar fuentes de energía alternativas para reducir los costos de inversión.