SANTIAGO — Chile expulsó el sábado a 29 migrantes de Colombia, Ecuador y República Dominicana sobre los que pesaban órdenes administrativas o judiciales, en momentos en que el gobierno del presidente Gabriel Boric ha recrudecido su discurso en torno a la migración irregular a la que promete cobatir.
Los extranjeros fueron embarcados en un vuelo de la Fuerza Aérea de Chile, confirmaron las autoridades. Se trata de 19 condenados por delitos como porte ilegal de armas y robo, entre otros. Además otros 10 fueron expulsados por ingresar clandestinamente o por tráfico ilícito de estupefacientes, detalló a la prensa el prefecto inspector de la policía de Investigaciones, Christian Sáez.
“Estamos trabajando como gobierno para aumentar las capacidades del Estado para poder expulsar más personas”, señaló Luis Eduardo Thayer, director del Servicio Nacional de Migraciones.
Informó que otros 13.000 que entraron irregularmente al país y solicitaron permiso para salir se les otorgó la autorización con una prohibición de ingreso y ya habrían abandonado Chile.
Como gobierno “vamos a ser inflexibles”, declaró Boric en un acto para presentar el programa de Control Territorial Focalizado el jueves, apuntando incluso a aquellos inmigrantes irregulares que no han cometido delitos.
“Los extranjeros que estén en situación irregular y no hayan concurrido al empadronamiento voluntario, aún cuando no cuenten con una orden de detención en su contra, se les dictará el decreto de expulsión”, afirmó el presidente.
En julio el gobierno inició un proceso de empadronamiento biométrico para registrar los datos de inmigrantes irregulares en el marco de una nueva política migratoria que también agiliza la expulsión de quienes no participen en el proceso.
De los más de 190.000 que se inscribieron preliminarmente en el proceso tan sólo 132.000 lo habrían completado, según las últimas cifras ofrecidas por las autoridades.
Chile arrastra desde hace meses un incremento de la violencia, con homicidios y secuestros que eran muy poco comunes en el país sudamericano.
Entre las medidas que lleva adelante el gobierno para enfrentar la situación está la expulsión de los migrantes indocumentados.