El Poder Ejecutivo promulgó una ley el 21 de agosto de 2001, la que fue hecha pública, como manda la Constitución, de modo que entró en vigencia de inmediato. Es una legislación muy especial y necesaria, a pesar de que se ha convertido en una de las piezas más vulneradas por los dominicanos que tenemos el privilegio de conducir un automóvil público o privado.
Se trata de la Ley 143-01, que prohíbe el uso del teléfono celular, también llamado teléfono móvil, mientras vamos en el volante por la vía publica. Una de las preocupaciones del legislador que redactó la pieza y la introdujo al Congreso Nacional, vía la Cámara de Diputados, es por la concentración y atención que debe tener la persona que conduce un vehículo determinado.
Son muchas las personas fallecidas por la inobservancia de la citada ley. Es por eso que a diario los oficiales y agentes de Amet son vistos levantando decenas de actas comprobatorias de violación a esta ley.
En 2012, por ejemplo, fueron colocadas 35,505 multas a conductores sorprendidos conversando por celular y 26,894 en 2013. En lo que va de 2014 la cifra alcanza cerca de 4,300, de modo que en los restantes 11 meses se podría estar contabilizando una cantidad superior a los 40 mil actas comprobatorias de violación flagrante a la Ley 143-01.
No hay dudas, en consecuencia, que debemos crear conciencia para evitar que el luto siga tocando las puertas de los hogares dominicanos.