Los partidos independentistas de Cataluña reivindicaron ayer su legitimidad para lanzar un proyecto de separación de España tras su victoria en las elecciones regionales, consideradas un “fracaso” por los partidarios de la unidad al no alcanzar la mayoría de los sufragios.
“El mensaje es claro”, insistió Raül Romeva, cabeza de lista de la coalición vencedora, Junts pel Sí (Juntos por el Sí, JxS). “Tenemos una mayoría clara que legitima totalmente iniciar el proceso” para proclamar en 2017 la independencia de esta rica región del noreste de España, agregó.
Los independentistas plantearon estas elecciones como una alternativa al referéndum de autodeterminación que Madrid les negó. JxS obtuvo 62 escaños y el otro partido secesionista ( CUP) unos 10.