Kabul.-El terremoto que hace una semana golpeó Afganistán causó cerca de 80.000 damnificados y daños a 11.000 viviendas, además de 129 muertos y 489 heridos, informó hoy la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) en ese país.
La cifra de fallecidos de la OCHA eleva ligeramente el dato oficial del Gobierno, que hasta el sábado contabilizó 118 muertos y 558 heridos por el seísmo de 7,5 grados en la escala de Richter que se registró el 26 de octubre con epicentro en Badakhshan, en el noreste de Afganistán.
La OCHA indicó en su informe que hay 78.853 personas afectadas y que 6.284 casas sufrieron daños mientras que otras 4.665 viviendas quedaron destruidas en 15 de las 34 provincias afganas.
Kunar y Nangarhar, en el oeste, y Takhar, en el norte, “han sido las provincias más duramente golpeadas en términos de víctimas, con 36, 28 y 23 (fallecidos) respectivamente”, destacó la agencia tras haber evaluado la situación en el 72 % de las 1.356 aldeas afectadas por el temblor y sus réplicas posteriores.
El resto se encuentran en zonas de difícil acceso por su orografía o por la presencia de insurgentes. Por necesidades, la dependencia de la ONU indicó que han recibido ayuda alimentaria 5.099 personas de un total de 58.590 que lo necesitaban; refugio, 9.124 de 41.433, y ayuda no alimentaria, 12.260 de 61.509.
China, Turquía, Pakistán, también afectado por el terremoto, Irán y Kazajistán han enviado ayuda material o dinero en metálico, mientras que la India, Japón, Qatar y el Reino Unido han ofrecido su asistencia.
El auxilio a los afectados se ha visto dificultado por los problemas de acceso y el mal tiempo tras el seísmo. El terremoto causó en el vecino Pakistán al menos 275 muertos y 1.802 heridos.