La “Casa de las caobas” es considerada como la segunda residencia de Trujillo, por la frecuencia de sus visitas a este lugar.
San Cristóbal .-¡Cimientos! En esa palabra se puede resumir lo único que queda en la “Casa de las caobas”, que en su momento fue una de las residencias predilectas del dictador Rafael Leónidas Trujillo para realizar diversas actividades, entre ellas encuentros sexuales.
Sesenta años atrás en este lugar “el generalísimo” acudía con frecuencia para descansar, recibir personalidades o simplemente estar lejos de la ciudad en compañía de una de sus “doncellas”, refieren varios libros de Historia.
Al mejor gusto del jefe, esa mansión estaba adornada con mobiliario de primera para la fecha, especialmente de caoba, razón de donde proviene su nombre.
Ubicación privilegiada
Está ubicada en una loma del sector La Suiza, con una vista hasta la vegetación y parte de la ciudad de San Cristóbal, desde donde Trujillo podía, incluso, realizar labores administrativas.
Allí se sienten temperaturas agradables, aunque en el centro del pueblo haya un “infierno climático”.
Esta casa, que data de 1940, tenía un segundo nivel con siete habitaciones, una paralela de la otra.
Descuido progresivo
Sin embargo, solo debieron pasar pocos años del ajusticiamiento del sátrapa para que el lugar se convirtiera en una ruina.
Su mobiliario fue saqueado, al punto que ninguna autoridad sabe dónde están las piezas que un día pertenecieron a Trujillo.
Filtraciones, deterioro estructural, matorrales y un difícil acceso es lo que matiza este lugar.
Incluso muchos de los residentes de esta localidad, especialmente los más jóvenes, desconocen que en su localidad exista la referida casa, que relativamente está a pocos kilómetros de cualquier punto de San Cristóbal.
Al recorrer su interior, especialmente en el segundo nivel, el mal olor da la bienvenida a quienes osan entrar.
Lugareños afirman que la “predilecta” casa en ocasiones es usada como hotel o guarida de delincuentes.
Propone rescate
Tras explicar que esta residencia era parte de la cultura patrimonialista de Trujillo, el historiador Roberto Cassá propuso ayer que este lugar sea remodelado y se construya un museo.
Pero esta no es la primera vez que se hace una propuesta de este tipo.
Desde principios de este siglo la Gobernación y la Alcaldía de San Cristóbal han afirmado que harán las gestiones de lugar con el Poder Ejecutivo para los recursos necesarios para su readecuación.
“Ojalá y hubiera una intención desde el punto de vista de la memoria y del patrimonio de rescatar esta residencia, porque ya hay otras que son irrescatables”, manifestó el historiador.
Resaltó que estos lugares tienen un singular valor histórico que podría sacárseles provecho.
“No solo las casas de Trujillo, aquí hay grandes patrimonios arquitectónicos que están descuidados y que necesitan ser rescatados”, refirió Cassá.
En octubre de este año un grupo de abogados instó al Ministerio de Cultura a rescatar y adecuar la “Casa de las caobas” para ser mostrada al público y que se incluya como uno de los lugares turísticos de San Cristóbal.