Carta a una adolescente

Carta a una adolescente

Carta a una adolescente

Hoy pido disculpas a mis lectores porque mi acostumbrado artículo ha dejado el espacio para hablar con una adolescente.  Aunque es el texto de una carta para una joven amiga, he considerado que si es leído aunque sea por una adolescente más, a mi vida se sumaría una inmensa razón para la alegría. Y si tú, amigo (a) lector (a) lo leyeras y la compartieras con alguna adolescente de tu entorno, sumariamos esfuerzos y energías para contribuir con una juventud más exitosa. Veamos:

Hola amiga. La razón por la que te escribo esta carta es porque estoy muy preocupada por tu futuro, ya que a tu edad las chicas tomamos decisiones cuyos resultados nos acompañan toda la vida y de eso quiero hablarte.

Estas viviendo los mejores tiempos de tu vida y te felicito por tu deseo de vivir, por tus ansias de conocer y por tu empeño por hacer realidad tus sueños, aunque es bueno que no olvides que la juventud es tan efímera como el viaje de una estrella fugaz.

Sé que tal vez tus padres no te han hablado sobre la sexualidad  responsable, queriendo protegerte, pero lo que ellos no comprenden es que ocultándote información lo que te están es haciendo un daño irreparable.

Todo tiene su tiempo debajo del sol, por lo que considero que entre los once y diecisiete años no es edad propicia para asumir la responsabilidad de tener relaciones sexuales, sobre todo por las consecuencias que pudiera esto implicar para ti y tu futuro. Las relaciones sexuales prematuras, y más si se realizan sin protección, traen como consecuencia enfermedades de transmisión sexual, embarazos no deseados y muchas complicaciones emocionales y familiares que considero puedes ahórratelos.  Aunque estoy consciente que no se aprende con las heridas en la piel de otros y corro el riesgo de que no me hagas caso, me siento motivada a comunicarte lo siguiente:

Muchas chicas como tú se inician muy temprano en la vida de adultos, teniendo como resultado una traumática experiencia. Es muy frecuente que terminen embarazadas sin quererlo. Un embarazo no deseado las lleva a una de dos posibles decisiones: la de ser madres sin estar preparadas o las de interrumpir la vida de una criatura inocente.

Cuando deciden tener un niño en plena adolescencia ya su vida no será igual, ya no habrá fiestas ni salidas con las amigas y los chicos de su edad ya no les verán de la misma forma, ya no serán las niñas lindas de la casa.  Y si tienen unos padres benévolos, que no les echan,   les quitarán muchos beneficios y atenciones para brindarlos a los bebés. Además,  a muchas chicas les toca trabajar muy duro y, en algunos  casos, hasta prostituirse contra su voluntad, tan solo para mantener a sus hijos.  Es decir que las chicas que se adelantan a su edad nunca saben lo que es ser joven porque envejecen antes de tiempo. También sus sueños se ven   postergados, porque ya no  sólo se trata de ellas, sino que tienen que cargar con sus hijos a donde quiera que vayan, lo que les dificulta avanzar en la vida.

 

Por otro lado, lo más probable es que las chicas que se embaracen en la adolescencia se sumaran a las cifras de madres solteras. Esto porque los muchachos de tu edad no quieren convertirse en padres, no están preparados ni psicológica ni socialmente para asumir esa responsabilidad.  Si alguno asume ese desafío es contra su voluntad, porque la familia(los padres) es muy seria.

Por otro lado, está la experiencia más traumática, que es la que experimentan  las chicas que, valiéndose de cualquier método, deciden abortar su criatura. Ellas cargarán con eso toda la vida, porque siempre se van a preguntar qué habría sido de ese niño de haberlo tenido, y eso es muy lastimoso, es muy cruel matar una vida por  no medir las consecuencias de nuestros actos.

También debes saber que las relaciones sexuales prematuras y sin protección pueden enfermarte. Cuando las personas contraen una enfermedad de transmisión sexual sus vidas se complican porque hay enfermedades, como en el caso del SIDA, que arruinan la juventud, ya que este es un síndrome que mata con el tiempo, y el VIH que es el virus, obliga a un tratamiento médico para toda la vida. Y, en general, cualquier enfermedad sexual produce muchos daños e impide el disfrute pleno de la sexualidad, que es un ámbito de mucha importancia en la vida de las personas.

Yo sé que en tu liceo o en tu comunidad el embarazo en adolescentes quizás esté de moda,  y muchas niñas quisieran vivir la experiencia de ser madres.  Créeme que yo viví algo parecido,  por eso te aconsejo que vivas tu juventud.  Hay muchas personas y   lugares por conocer, hay muchos sueños que esperan ser conquistados.  No dejes que un minuto de locura modifique toda tu vida. Hay etapas que debes quemar, sin las cuales no serás una persona plenamente feliz.  Planifica tu futuro, porque el mejor embarazo es el que resulta de una decisión en el seno de una familia integral, donde papi y mami desean tener un bebé, que llega bendecido y se siente amado y aceptado desde el primer instante de su concepción.

En el colegio te encontraras con amigas que sabiendo que no has tenido relaciones sexuales te van a presionar para que las tengas, ya que ellas sienten necesidad de acompañar sus culpas incorporando otras compañeras de viaje.  Respóndeles que esperaras estar preparada y que deseas vivir plenamente tu niñez. No será más mujer quién más temprano inicie la sexualidad sino quién llega a ella habiendo dejado atrás todas las dudas e inseguridades de la adolescencia.

Disculpa si en algún momento sentiste que me he metido donde no me han llamado, pero dicen por ahí que es más sabio quien ve el peligro a lo lejos y no lo enfrenta cambiando de ruta.

 

Muy sinceramente, deseando lo mejor para ti,

Isauris Almánzar