SANTO DOMINGO.-Para muchos ser seleccionados para ocupar una posición pública es traducible y comparable a un premio otorgado por un trabajo político previo.
Para Carlos Pimentel, actual director general de Contrataciones Públicas (DGCP), no es así en ninguno de los sentidos.
De hecho, estuvo a punto de rechazar el cargo una vez que consultó la propuesta con su familia.
“La consulta familiar arrojó que no iba a asumir la posición, somos muy respetuosos y no queríamos que se interpretara que habíamos usado nuestra participación en la sociedad civil como eslabón de promoción”, dice el experimentado abogado, quien trabajó activamente en Participación Ciudadana los últimos quince años y donde finalmente se desempeñó como director general.
“Algunos interpretan que la sociedad civil es enemiga del gobierno y no es así. Pero no quería malas interpretaciones, por lo que solicité una reunión con el Consejo Directivo de PC”, relata Pimentel.
Informó que de esa reunión salió el visto bueno de sus compañeros de lucha civil. “Si en ese encuentro se hubiera levantado algún tipo de oposición, habría declinado la invitación”.
Antecedentes
Pimentel es hijo de Carlos Pimentel, ya fallecido y la académica universitaria Clara Elena Florenzán, quien tiene la distinción de ser la primera mujer dominicana en especializarse en el área de la Física, dijo en entrevistado.
Al completar sus estudios de derecho en el año 2000 laboró por cinco años en la Procuraduría General de la República, en la Unidad de Ética, lugar en el que nació su interés por luchar contra la corrupción administrativa.
“Luego participé de un concurso y empecé a trabajar con PC. Allí pude obtener una mirada más amplia del panorama y, hasta agosto, mi atención estuvo enfocada y dirigida a las luchas sociales”, afirmó Pimentel.
Niveles de confianza
Narró que se sintió a gusto pero a la vez comprometido cuando fue anunciada su designación debido a la reacción positiva de la ciudadanía.
“Muchas veces incluso la gente expresaba sus deseos por cosas que no están dentro de nuestras funciones”.
Esto le ha llevado a emprender, junto a su equipo de trabajo, tareas tendentes a modernizar la DGCP.
En 90 días de gestión computa un total de 9,243 personas y compañías que desean ser proveedores del Estado, 2,500 actualizaciones y 3,500 creaciones.
El portal institucional ha experimentado saturación debido a esta cantidad de solicitudes. Pimentel interpreta la actividad como una señal de que la confianza en los procesos se va desarrollando.
Las mejoras
Junto a las subdirectoras de la entidad, Ruth Manzueta y Crystal Fiallo, con quienes comparte años de trabajo, ha elaborado, en coordinación con varias universidades del país, un técnico superior en Contrataciones Públicas.
Entre las mejoras que se proponen implementar en los próximos meses está la subasta inversa electrónica, una modalidad permitida en la Ley, pero que nunca se ha aplicado. La misma permitirá, bajo un producto estandarizado, permitir pujas hacia abajo a las cuales se les podrá dar seguimiento en línea.
También, bajo la coordinación del ingeniero José Armando Tavárez, trabajan en el montaje de un sistema que permitirá dar seguimiento a todos los procesos de compra y que determinará posibles irregularidades.
“El monitoreo activo y preventivo es ciencia de los datos para tener capacidad de monitorear los procesos en tiempo real, cosa que no se puede hacer con los papeles”, declaró Pimentel.
Este sistema identificará cuando entidades empresariales con accionistas comunes participan de un mismo proceso e intentan alterar la oferta.
Las Mipymes
Entre sus prioridades figuran el dar participación activa en los procesos de compra del Estado a las micro, pequeñas y medianas empresas, conforme a lo estipulado en la Ley de Compras y Contrataciones.
La legislación exige garantizarles un 20% del pastel y un 5% a las Mipymes mujeres. A fin de lograrlo han iniciado una serie de conversaciones con estos sectores a nivel nacional que están siendo coordinados por la subdirectora Crystal Fiallo.
Evaluación
12,000 Procesos de compra
Publicados y registrados por el portal de la DGCP en los últimos noventa días.