Cincinnati, Ohio.-Superar al ex astro Pedro Martínez como lanzador, es la gran meta que tiene el también pitcher dominicano Carlos Martínez, de los Cardenales de San Luis, quien asegura que al final los números hablarán por sí solos.
“Si él pudo ser inmortal, yo también podré serlo”, aseguró Martínez, quien dijo que Pedro es su ídolo y cada vez que tienen la oportunidad de conversar le dice que terminará su carrera siendo mejor que él.
“Sé que es una vara bien alta la que me estoy poniendo, y si digo que quiero ser mejor que él, es porque quiero superarme y porque él es un ejemplo a seguir”, explicó Martínez, quien constantemente es comparado con Pedro por su baja estatura y la fortaleza de sus lanzamientos.
“Yo no trato de imitarlo sobre el montículo, aunque si en lo que él ha hecho en su vida. Quiero ser tan humilde como él para ser exitoso”, dijo Martínez, quien en la primera mitad de la campaña tuvo marca de 10-3, con magnifica efectividad de 2.52.
Gracias a ese gran desempeño, Martínez ganó el voto final de los fanáticos para asistir a su primer Juego de Estrellas superando nada más y nada menos que a los lanzadores estelares Clayton Kershaw, de los Dodgers, y su compatriota Johnny Cueto, de Cincinnati, así como al campocorto Troy Tulowitzki, de Colorado, y al quisqueyano Jeurys Familia, de los Mets.
Su gran problema
Martínez dijo que reconoce que para triunfar como lanzador, tendrá que aprender a controlar la emotividad que le afecta cuando las cosas no salen como quiere, ya que se pierde cuando le hacen errores o porque no hace el pitcheo no lo coloca donde quiere y le dan el palo.
“He aprendido bastante de mis errores. Sé que la emotividad es mi mayor enemigo, pero gracias a Dios tengo al cátcher Yadier Molina, quien me ayuda bastante en esa parte, dándome confianza para que pueda llevar mi juego sin salirme del plan que trazamos”, reveló Martínez al ser entrevistado por EL DÍA en el Juego de las Estrellas.
Honra a Oscar Taveras
Con lágrimas en los ojos que no podía parar, Martínez dijo que se sentía triste y alegre porque en el Juego de Estrellas porque su entrañable amigo Oscar Taveras no está aquí.
“Oscar sabe que donde quiera que esté que juego en honor a él. Estoy disfrutando de primer Juego de Estrellas y me hubiese gustado estar con él”, dijo el «Tsunami» mientras se secaba las lágrimas.
