Santo Domingo.-Sin proponérselo, Carlos Manuel logró descollar en la música en Rusia como artista, mientras cursaba una maestría en la Universidad de la capital de esa nación.
Su familia no quería que fuera artista y al terminar el bachillerato se fue a la universidad y estudió Ingeniería Civil. Se llevó de sus padres y al cabo de un tiempo consiguió su título de ingeniero, carrera en la que empezó a trabajar, olvidando la música.
La suerte le llegó cuando trabajaba en una empresa de construcción, de la que su presidente lo envió a hacer una maestría a Rusia, a petición del propio artista.
“Llegué a Rusia medio asustado, sin conocer a nadie. A los tres meses de estar allá, la universidad realizó una actividad llamada “La semana Latina” y todos los países debían presentar un número folklórico de su tierra.
Los dominicanos que estaban allá no habían preparado nada. Algunos sabían que yo cantaba y era músico y me delataron con los demás”, expresó.
De esa forma lo hicieron participar. Se inscribió y buscó una pista del merengue “Mi tierra”, que popularizó El Jeffrey en 2004 y cuando terminó de cantar en el camerino lo estaba esperando la directora de cultura de la universidad.
Ella le expresó que cantaba muy bien y que quería integrarlo al grupo Ráduga, que pertenecía a la universidad, lo que él aceptó.
Al poco tiempo era famoso entre los estudiantes y profesores, representando la universidad en diferentes escenarios.
“Me convertí en un embajador de la universidad y la representaba dentro y fuera de Rusia. Me empezaron a mandar a concursos, ganando primero, segundo y tercer lugar en diferentes festivales”, expresó, entrevistado el joven merenguero.
El merengue
En Rusia estudió canto folklórico y se lanzó en 2013 con la bachata “Maldito miedo”. Ahora se encuentra en el país con el merengue “Ni un segundo nada más”.