El rey Carlos III y Camila, la reina consorte, durante la ceremonia de proclamación en el Palacio de St. James.
Carlos III fue proclamado rey.
Su ascenso al trono fue oficializado en una ceremonia celebrada este sábado en el Palacio de St. James, en el centro de Londres.
Carlos se convirtió en rey inmediatamente después de la muerte de su madre, la reina Isabel II, pero no fue hasta este sábado cuando su nuevo rol fue oficialmente confirmado.
El monarca fue proclamado por el Consejo de Ascensión y prestó juramento durante una elaborada y tradicional ceremonia, que no se había llevado a cabo en más de siete décadas.
Durante el acto, que fue televisado por primera vez en la historia, las banderas que se habían bajado a media asta en duelo por el fallecimiento de la reina Isabel se izaron de nuevo para celebrar al nuevo rey.
Más proclamaciones tendrán lugar en todo Reino Unido hasta el domingo, cuando las banderas volverán a estar a media asta durante el período de luto que sucede a la muerte de la reina, el pasado 8 de septiembre.
Cómo fue la ceremonia
El evento se divide en dos partes, y el rey solo está presente en la segunda.
En la primera parte, el presidente del Consejo Privado -en este caso la parlamentaria Penny Mordaunt, nombrada recientemente por la actual primera ministra Liz Truss- oficializó la muerte de Isabel II.
Luego el secretario del Consejo leyó en voz alta el texto de la Proclamación de Ascención, incluido el título elegido por Carlos como rey, Carlos III.
La proclamación está firmada por un grupo que incluye a la reina consorte, el príncipe de Gales, el arzobispo de Canterbury, el lord canciller, el arzobispo de York y la primera ministra. Antes de la firma, los asistentes pronunciaron el «Dios salve al rey».
El rey entró para la segunda parte del Consejo, al que asisten solo consejeros privados. En ella dio una declaración personal sobre la muerte de la reina.
«Es mi obligación más dolorosa anunciar la muerte de mi querida madre, la reina», señaló.
«Sé cuán profundamente ustedes, la nación entera -y diría que el mundo entero- simpatizan conmigo en esta irreparable pérdida que hemos sufrido».
«La simpatía expresada por tanta gente a mi hermana y hermanos es mi mayor consolación. Y ese abrumador cariño y apoyo debería ser extendido a toda nuestra familia en nuestra pérdida».
También rindió homenaje a Camila, la reina consorte. «Estoy profundamente alentado por el apoyo constante de mi amada esposa», dijo.
Qué es el Consejo de Ascensión y quién lo forma
El Consejo de Ascensión es un cuerpo ceremonial que se reúne tras la muerte de un monarca para hacer la proclamación formal de la ascensión del sucesor al trono.
Históricamente (desde el tiempo de los reyes normandos), participan en el consejo todos los miembros del también llamado Consejo Privado (Privy Council, en inglés), que está integrado por un grupo de políticos de alto rango que asesoran formalmente al monarca, el alcalde de la ciudad de Londres y jueces y funcionarios importantes.
El Consejo Privado se remonta a los primeros años de la monarquía, cuando estaba formado por aquellas personas designadas por el rey o la reina para que los asesoraran en asuntos de Estado.
Actualmente hay cerca de 700 miembros -la mayoría políticos del pasado y del presente-, pero solo 200 de ellos participaron este sábado para firmar la proclamación. Entre ellos se encuentran los ex primeros ministros Boris Johnson, Theresa May, David Cameron, Gordon Brown, Tony Blair y John Major.
Entre los asistentes también estuvieron la reina consorte, Camila, y el hijo del rey, William, el nuevo príncipe de Gales.
La proclamación de Carlos III también se leyó en Edimburgo, Cardiff y Belfast, las capitales de Escocia, Gales e Irlanda del Norte, respectivamente.
El juramento
El nuevo monarca está obligado a prestar juramento para preservar la seguridad de la Iglesia de Escocia en su ascenso.
En Escocia existe una división de poderes entre la Iglesia y el Estado, cada uno supremo en su propia esfera.
La Iglesia se gobierna a sí misma en todo lo que concierne a sus propias actividades. Su autoridad suprema es la Asamblea General de la Iglesia de Escocia, presidida por un moderador elegido cada año por la propia Asamblea.
Este juramento ha sido proclamado por todos los monarcas durante su ascención, desde Jorge I en 1714.
El rey firmó dos documentos del juramento para registrarlo, con la reina consorte y el príncipe de Gales entre los testigos de su firma.
Después tuvo lugar lugar la primera proclamación pública desde el balcón del Friary Court del Palacio de St. James, a través de un funcionario conocido como el Rey de Armas Principal de la Jarretera, acompañada de un espectáculo centenario, con trompetistas tocando una fanfarria y sonó el himno nacional, con las palabras «Dios salve al rey» y no «Dios salve a la reina» por primera vez desde 1952.
También se dispararon 41 salvas desde Hyde Park y 62 en la Torre de Londres.
Tras la finalización de la ceremonia St. James, se leyó la proclamación en la City, el distrito financiero de Londres.
Ahora puede pasar un tiempo antes de que se lleve a cabo la coronación de Carlos III, que será el gran momento simbólico de su ascenso al trono.
Pasaron unos 16 meses entre la muerte del padre de la reina Isabel, el rey Jorge VI, en febrero de 1952 y su coronación en junio de 1953.
Análisis de Sean Coughlan, corresponsal de la Casa Real
El nuevo rey rindió un cálido homenaje a su madre, pero este fue el momento en que Carlos comenzó a pensar en el futuro de su propio reinado.
Ante las filas del Consejo de Ascensión, el rey Carlos prometió dedicar el resto de su vida a servir como monarca.
Fue una mezcla de lenguaje ritual, ornamentado y practicidad constitucional.
Carlos es ahora el jefe de Estado y esta fue el traspaso simbólico y sin incidentes de un reinado al siguiente, con juramentos y firmas.
El tintero utilizado para ello se lo habían regalado sus hijos, el príncipe William y el príncipe Harry.
Los anuncios también confirmaron que el día del funeral de Estado de la reina será un día feriado.
Pero aquí estaba el rey asumiendo públicamente sus nuevas responsabilidades, prometiendo seguir el ejemplo de la reina. Fue una coreografía de la continuidad.
Cómo será la coronación
En los últimos 900 años la coronación se ha celebrado en la abadía de Westminster. Guillermo el conquistador fue el primer monarca en ser coronado allí y Carlos III será el número 40.
Se trata de un servicio religioso anglicano, oficiado por el arzobispo de Canterbury. En el momento cumbre de la ceremonia, el arzobispo colocará la corona de San Eduardo sobre la cabeza de Carlos, una pieza de oro sólido que data de 1661.
La corona es la pieza principal de las Joyas de la Corona en la Torre de Londres y solo la usa el monarca en el momento de la coronación (especialmente por su peso de 2,23 kg).
A diferencia de las bodas reales, la coronación es un evento de Estado, y el gobierno paga por esta y, en última instancia, decide la lista de invitados.
Habrá música, lecturas y el ritual de unción del nuevo monarca, utilizando aceite de naranja, rosas, canela, almizcle y ámbar gris.
El nuevo rey realizará el juramento de coronación frente a un mundo expectante. Durante esta ceremonia recibirá el orbe y el cetro como símbolos de su nuevo papel y el arzobispo de Canterbury colocará la sólida corona de oro sobre su cabeza.