¡Caramba Lalo Gómez, cuanto me duele tu muerte!

¡Caramba Lalo Gómez, cuanto me duele tu muerte!

¡Caramba Lalo Gómez, cuanto me duele tu muerte!

Bienvenido Carmona

Lalo Gómez y yo éramos amigos…. Y quizá por eso, pocas personas son tan entusiastas con esta columna como lo era él… No sólo la esperaba con expectativa, sino que me llamaba a preguntar “qué pasó” cuando por alguna razón no salía… Además, no sólo la posteaba, sino que la leía y “sazonaba” en su programa televisivo Meta Deportiva, en los segmentos “El Desahogo” y en “Las redes hablan”…

Y casualmente estaba diciendo que lo llamaría para que me enviara el link de la sección del miércoles, cuando recibí un mensaje de mi amigo Freddy Tapia de que “murió Lalo”…

Quedé frío, pero como si fuera un niño, dándome un poco de esperanza, le pregunté “¿qué Lalo?” y ahí vino la fatídica confirmación con apellido y más detalles: “Lalo Gómez, lo encontraron muerto en el baño, parece que le dio un infarto”…

Y ni siquiera así quise rendirme y en busca de esperanza llamé al amigo Américo Celado, miembro del programa de Lalo y le dije “dime que es mentira lo que me están informando”, pero que va, me dijo que era cierto, y agregó que “no hay un día que no hablara de ti”…

En mis ojos comenzó a llover de inmediato, tanto como está ocurriendo ahora al escribir estas líneas… No tengo que decir mucho de cuánto me ha afectado esta muerte, porque todos han visto que el solo hecho de que en esta entrega hasta me obligó a cambiar la “línea editorial”, lo que casi no sucede, es porque ha sido duro, muy duro… ¡Caramba amigo Lalo, caramba!..

Tantas conversaciones y en ninguna me dijiste nada de que tenías alguna dolencia… ¿Qué me consuela? Que como ministro del Reino que soy, sé que Dios te colocó al lado de los buenos y que tu alma descansa en paz…