Bloomberg News.-Con la adquisición de Grand Marnier Group, Davide Campari-Milano SpA recibe más que una marca de licor popular.
El destilador italiano también se hace acreedor de una villa histórica en una ciudad costera francesa famosa por tener las propiedades residenciales más caras del mundo.
La familia Marnier-Lapostolle, que controla Grand Marnier, es propietaria de Villa les Cèdres en Saint Jean Cap Ferrat desde los años 1920. La propiedad, rodeada por un jardín botánico de 14 hectáreas (34,6 acres), se encuentra en la península que avanza sobre el Mediterráneo entre Niza y Mónaco.
Entre sus vecinos se cuentan el cofundador de Microsoft Corp., Paul Allen, el ejecutivo de OAO Lukoil, Leonid Fedun, la familia Ferrero famosa por Nutella y Curt Engelhorn, el biznieto del fundador de la compañía química alemana BASF SE, según informes de los medios.
Campari dijo que proyecta vender la propiedad y compartir el fruto de la venta con los accionistas de Grand Marnier. Puede resultar difícil que aparezcan compradores en un mercado donde, según la revista francesa de finanzas, Capital, las propiedades pueden ascender a más de 220,000 dólares el metro cuadrado.