“Camp es una mujer andando con un vestido hecho con tres millones de plumas”.
Susan Sontag, Notes On Camp.
Los afeminados zapatos del rey Luis XIV; atravesando el lago de fuego que consumió en tiempo presente, premiándolo luego con la posteridad el portentoso Oscar Wilde por “pecar” al amar a illis homines y tatuar fatuamente sus vivencias con fervor literario ; los hitos andróginos en diseños de moda de gigantes como Lagerfeld y McQueen. El concepto camp (gusto adquirido por lo extravagante, lo antiestablecido, una forma diferente de ver la vida, con toda la complejidad que ello implica) ha reinado en la nueva edición de la MET GALA 2019 -el icónico evento de la moda que cada año se realiza en el Museo Metropolitano de las Artes, que busca recaudar fondos para su Instituto del Vestido, y que reúne a distintas celebridades que despliegan su creatividad con sus outfits-.
El comisario y curador de la exposición Andrew Bolton, se ha basado en el vasto ensayo de la iconoclasta escritora neoyorquina Susan Sontag (1933-2004) llamado Notes On Camp, donde establece en 58 puntos una suerte de manifiesto sobre el camp y su amor por lo antinatural: el artificio, lo exagerado como discurso y adarga.
Ataviar de profundo concepto a un mundo que cruza constantemente la barrera de lo superfluo como la moda, ha sido un triunfo. Una muestra de que lo Queer y el discurso reivindicativo de la marginalidad atraviesan transversalmente la vanguardia cultural de la contemporaneidad, otorgándoles notoriedad inusitada. Lo que antaño furtivo, hoy se hace establishment. Habrá tanto desacuerdos razonables como resabios desconsideradamente conservadores, pero la visión ha estado por centurias. Y va por más.
CAMP, Notas sobre Moda. Desde el 9 de mayo hasta el 8 de septiembre en el Museo Metropolitano de las Artes, New York, USA.