¡Buenos Días!

¡Buenos Días!

¡Buenos Días!

Renaldo Bodden

Cuando vi a Luis Mejía Oviedo y a Persio Maldonado Sánchez, comunicadores y deportistas, haciendo guardia de honor simultáneamente frente al féretro que contenía el cuerpo sin vida, pero con gran legado, del incansable director Rafael Molina Morillo, no me contuve y atrapé la gráfica.

El Doctor, periodista vertical, equilibrado, critico, pero ético, decía sus verdades con elegancia, aunque a veces, quizás pocas veces, también golpeaba la mesa en aras de promover los mejores intereses de la nación, y por ello en muchas ocasiones se refirió a las bonanzas del deporte como una actividad que bien aplicada engalana una sociedad en apuros.

Mejía Oviedo, presidente del Comité Olímpico , y Maldonado, presidente de la Federación de Tenis, tienen en su entorno una juventud que requiere de sana orientación política, económica, social y deportiva.

Desde ya suenan en los mentideros deportivos como las dos figuras que el año próximo se podrían estar disputando la presidencia del COD en un proceso que con mucha frecuencia distorsiona una democracia aplicada a conveniencia. Nadie debe dudar que son dos de los mejores promotores del deporte.

Un buen homenaje a Molina Morillo sería «jalar en una misma dirección», siempre que se pueda, como tantas veces proclamó ese defensor de las buenas maneras en su refrescante e inquebrantable ¡Buenos Días!



TEMAS