Brayan Bello regresa con fuerza y corazón a los Medias Rojas

En una noche marcada por la emoción y la resiliencia, Brayan Bello firmó su regreso al montículo con autoridad. El joven lanzador dominicano enfrentaba a un rival de peso, Randy Arozarena, con cuenta llena, un hombre en segunda y solo un out en el quinto episodio. Sabía que ese momento podía marcar su noche… y no falló.

Con su lanzamiento número 97, un slider que cortó el aire como cuchilla, Bello dejó congelado al cubano-mexicano. La respuesta fue inmediata: un grito al cielo y el puño alzado. El dominicano celebraba no solo un ponche clave, sino el regreso a su mejor versión.

Brayan Bello after bringing his 4SFB back last season.

91 IP
3.66 ERA/3.67 FIP
8.8 K/9
3.5 BB/9
.235 BAA
48% GB%

Red Sox need this version of him in 2025. That starts tonight against the Mariners.pic.twitter.com/FLJaeYh2OS

— Tyler Milliken (@tylermilliken_) April 22, 2025

Así, Bello lideró la victoria de los Medias Rojas 8-3 ante los Marineros de Seattle en el Fenway Park, en el primer juego de la serie. Fue su primera salida de la temporada, y demostró que está listo para ser un pilar en la rotación de Boston.

“Muy emocionado. Un momento muy emotivo para mí”, declaró tras el partido. “Traté de hacer mi trabajo desde el primer pitcheo hasta el último. Fue especial poder volver y competir”.

De un inicio turbulento a un cierre dominante

El camino, sin embargo, no comenzó fácil. En la primera entrada, Jorge Polanco le conectó un cuadrangular. Luego, Bello otorgó un boleto, golpeó a dos bateadores y llenó las bases con un solo out. La tensión era palpable.

Pero en cuenta de 1-1 frente a Rowdy Téllez, ejecutó con sangre fría. Indujo un rodado perfecto para doble matanza: Casas a Story y de vuelta a Bello, quien cubrió primera con una estirada atlética. Así, escapó del inning sin más daño.

“Creo que es la primera vez que golpeo a dos bateadores en un mismo inning”, confesó entre risas. “Después me calmé. Solo quería hacer mi trabajo”.

Bello trabajó 5.0 entradas en total, permitiendo una carrera y cuatro hits, con tres boletos y tres ponches. Diez de sus quince outs llegaron por la vía del roletazo, mostrando el sello de su repertorio. Después del jonrón inicial, no permitió más batazos elevados.

Un susto y una promesa

En el cuarto inning, Bello sufrió un calambre en la pantorrilla derecha que obligó a la visita del manager Alex Cora y el kinesiólogo Brandon Henry. Aunque el momento preocupó a todos, el lanzador insistió en seguir.

“No es nada serio”, aseguró. “Voy a estar listo para mi próxima apertura”.

Cora confirmó que el cuerpo médico lo revisará, pero hasta ahora todo indica que estará en condiciones para lanzar el domingo.

Casas, poder entre las sombras

La otra gran historia de la noche la protagonizó Triston Casas, quien atraviesa un comienzo difícil en la temporada. Pero en el séptimo episodio, con dos compañeros en base, conectó un jonrón de tres carreras que selló la victoria y puso fin a su sequía ofensiva.

“Se sintió bien poder contribuir. Además, siempre es divertido ponerse el casco de Wally”, dijo entre risas, aludiendo al ritual del equipo que corona al héroe del jonrón con una réplica de la cabeza de su mascota.

Con un promedio de .165 y una línea de poder aún discreta, Casas sigue en proceso de ajustes bajo la mirada cercana del cuerpo técnico.

“Está luchando”, admitió Cora. “Sabemos que tiene más poder. Hoy vimos un buen indicio de lo que puede hacer”.

Una señal positiva para Boston

El regreso de Bello, su temple en momentos claves y la chispa de Casas son señales positivas para un equipo que busca consolidarse temprano en la temporada. Si la salud lo acompaña, Bello no solo será un abridor confiable, sino un verdadero líder de la rotación.

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