Brasilia.- El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, dijo este sábado que no teme complicaciones en la cirugía a la que se someterá el domingo en el abdomen, la cuarta desde que fue acuchillado hace un año cuando participaba en un mitin electoral.
El líder ultraderechista, en declaraciones que concedió a periodistas, afirmó estar tranquilo antes de la intervención quirúrgica a la que será sometido en Sao Paulo y añadió que espera regresar a Brasilia antes del jueves. “Hace dos días que estoy obedeciendo fielmente lo que los médicos ordenaron.
Si Dios quiere todo correrá bien”, afirmó el jefe de Estado al manifestar su tranquilidad y al indicar que desde el jueves viene cumpliendo una dieta líquida.
La cirugía para corregir una hernia de incisión en el abdomen que surgió como consecuencia de las anteriores operaciones está prevista para la mañana del domingo en el hospital Vila Nova Star de la ciudad de Sao Paulo, a donde Bolsonaro viajará este mismo sábado para ser ingresado.
La cirugía es considerada de medio porte y los médicos prevén que el mandatario permanecerá hospitalizado hasta el jueves. “Espero volver antes de eso, aunque parece difícil”, afirmó Bolsonaro, quien transmitirá el cargo antes de su hospitalización al vicepresidente de Brasil, el general de la reserva Hamilton Mourao.
La previsión del Gobierno es que Mourao ejerza interinamente la Presidencia al menos hasta el martes, ya que el gobernante, como hizo la última vez que fue operado y cuando ya ejercía su mandato, pretende montar un Gabinete en el propio hospital para asumir sus funciones.
Bolsonaro tiene previsto viajar este sábado a Sao Paulo en compañía de la primera dama, Michelle Bolsonaro, y de dos de sus hijos, el diputado federal Eduardo Bolsonaro y el concejal por Río de Janeiro Carlos Bolsonaro.
Según el médico Leandro Echenique, miembro del equipo médico del gobernante, la nueva cirugía es más simple que las anteriores y común entre las personas que se sometieron a intervenciones en el abdomen.
El especialista dijo que, pese a que no se queja de dolor en el abdomen y a que la hernia no es aparente, el presidente sí admite sentir incomodidad en la región.
Bolsonaro recordó este viernes, cuando se cumplió el primer año del ataque, que prácticamente nació de nuevo y que por poco pierde la vida.
El autor del ataque, Adelio Bispo, fue detenido el mismo día, pero en junio de este año la Justicia lo absolvió por considerarlo no imputable por sus problemas mentales, una decisión a la que defensa de Bolsonaro interpuso un recurso para impedir que la persona que supuestamente ordenó el ataque quede impune.