BRASILIA.-El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, cumple hoy 100 días al frente de un Gobierno que todavía intenta construir una base parlamentaria, cuyo proyecto aun no está totalmente definido y con una popularidad que cae a paso redoblado.
El ultraderechista capitán de la reserva del Ejército se impuso en las elecciones de 2018 con un duro discurso contra la política tradicional que ahora le pasa factura en un Congreso atomizado, en el que la falta de una coalición sólida dificulta el trámite de las más importantes propuestas del Gobierno.