SANTO DOMINGO.-La llegada de los fármacos biosimilares trae consigo la aparición de terapias más baratas e igual de eficaces para patologías complejas, como la artritis reumatoide (AR), psoriasis, enfermedad de Crohn, esclerosis múltiple, diabetes o el cáncer.
Al hablar sobre esta enfermedad y sus opciones terapeúticas, la doctora Alejandra Babini, especialista en Medicina Interna y Reumatología y jefe del Servicio de Reumatología del Hospital Italiano de Córdoba, Argentina, indica que “ahora lo que se trata es incidir en el transcurso de la enfermedad con tratamientos efectivos para evitar la incapacidad”.
Aclara que cuando se habla de artritis reumatoide las personas deben entender que es una enfermedad incurable, donde los especialistas deben apostar a opciones terapeúticas que mejoren la calidad de vida del paciente.
“Es importante tener en cuenta que luego de los 10 años de su aparición, esta enfermedad invalida laboralmente a quien la padece, y tienen una prevalencia de 0.3 a 1.0 por ciento de la población, mayormente en mujeres”, explica Babini.
Diagnóstico a tiempo
Aconseja a las personas consultar si sienten alguna inflamación sin ninguna causa aparente, pues es la primera señal de alerta que se suma a la aparición y persistencia de dolor en las articulaciones.
Indica: “Ojalá los pacientes pudieran prestar atención a las señales, pues no es lo mismo tratar esta enfermedad tarde que temprano, pues una artritis no tratada puede matar a una persona 10 a 15 años antes de su tiempo normal”.
Babini, expresidenta de la Sociedad Argentina de Reumatología, afirmó que el manejo de la AR ha cambiado mucho en los últimos 20 años, “ya no nos sentamos a ver cómo se deteriora el paciente, y las opciones terapeúticas brindan mejor calidad de vida en una enfermedad que no tiene cura”.
Destaca que, luego de aparecer esta enfermedad, si el paciente no recibe tratamiento adecuado, a los diez años pierde su capacidad laboral, pues es un problema doloroso e invalidante.
Acción de medicamentos
El medicamento correcto es aquel que logra controlar y detener el proceso de inflamación, así como mantener o restaurar la función física.
Indica que su proceso de inflamación sistémica crea otras complicaciones, como las cardiovasculares, que desencadenan en la muerte, “pero si llegamos temprano al tratamiento no vemos más este tipo de resultados”.
Asegura que el paciente debe entender qué es la artritis reumatoide, cuál es el tipo de tratamiento que necesita y qué le pasará si no asume con responsabilidad las indicaciones de sus especialistas.
Opciones terapéuticas
Los Fármacos Sintéticos Modificadores de la Enfermedad (FAME) suelen ser el primer escalón de tratamiento tras el diagnóstico del trastorno.
Estos controlan los síntomas y la inflamación, y reducen el número de brotes, controlando la evolución de la enfermedad, siendo el más frecuente el metotrexato, por ser efectivo en mejorar sus síntomas.
Otros tratamientos más novedosos son los Fármacos Biológicos Modificadores de la Enfermedad, que se utilizan en aquellos casos en los que el tratamiento con Metotrexato u otros FAME no ha sido suficiente para mejorar los síntomas de la enfermedad o cuando los FAME sintéticos no son bien tolerados por el paciente.
Estilo de vida
La doctora Babini aconseja asumir con seriedad el compromiso de cambiar el estilo de vida vigilando el peso, pues el exceso es una carga extra para caderas y rodillas.
Recomienda hábitos alimenticios más saludables y hacer ejercicio con regularidad, ya que algunos mejoran la movilidad, fuerza y resistencia.
“Debes adaptar el ejercicio a tu situación concreta y al estado de tu enfermedad, haz ejercicios suaves y evita sobreesfuerzos, sobre todo si tienes un brote de artritis o inflamación”.
En el mundo de las patologías crónicas, vivir es más caro
Los biosimilares pueden ofrecer una alternativa más económica que los productos biológicos existentes que han perdido ya sus patentes y favorecer una limpia competencia, mejorando por tanto el acceso de un mayor número de pacientes a los medicamentos, contribuyendo así a la sostenibilidad financiera de los sistemas sanitarios.
Aunque la diferencia de precios entre los biosimilares y sus correspondientes medicamentos de referencia en valores absolutos no tiene todavía un gran impacto, los primeros han experimentado un crecimiento en los últimos años, reduciendo el coste de las terapias en enfermedades crónicas como la artritis reumatoide. Aspiramos que siga la innovación y, por ende, el ahorro.
10 Años con los biosimilares
Pfizer expande su compromiso con terapias de biosimilares que pueden mejorar la vida de los pacientes.
Seminario
Para periodistas
Alejandra Babini participó en el seminario sobre la importancia de los medicamentos biológicos y biosimilares en el tratamiento de la artritis reumatoide, organizado por Pzifer para periodistas en Ciudad de Panamá.