WASHINGTON. – La posible victoria de Hillary Clinton en las elecciones presidenciales del 8 de noviembre ya desató las discusiones sobre cómo referirse a su esposo, el expresidente Bill Clinton, quien retornaría a la Casa Blanca pero como consorte de la mandataria.
Únicamente hombres han ocupado la presidencia de Estados Unidos y ejercieron el poder al lado de sus esposas, las «primeras damas».
La única excepción fue James Buchanan, presidente entre 1857 y 1861, un soltero empedernido hasta el fin de sus días.
Pero Bill Clinton sería un caso inédito, ya que no solamente sería el primer esposo de una presidenta, sino también el primer expresidente en ocupar la Casa Blanca sin un cargo específico.
En la Casa Blanca, por ejemplo, existe formalmente una Oficina de la Primera Dama, que tiene su propio equipo y que muy posiblemente será rebautizada para uso del expresidente Clinton.
En Estados Unidos es común que las personas utilicen la nomenclatura del más alto cargo que hayan ejercido. Esa es la razón por la que Hillary Clinton es llamada «señora secretaria», por haber sido secretaria de Estado, y su esposo es llamado «señor presidente Clinton».
¿Primer caballero?
Lisa Grotts, una experta en etiqueta, recordó que «en Estados Unidos tenemos seis gobernadoras, y a sus esposos extraoficialmente se los llama ‘primer caballero’. Pero no hay una regla definida».
En el caso de Clinton, añadió Grotts, «una vez presidente, para siempre presidente, y ése será su título para siempre».
Allida Black, una experta sobre primeras damas en la Asociación Histórica de la Casa Blanca, no tiene dudas de que Bill Clinton será presentado como «presidente» cuando la pareja sea presentada en eventos formales, como en cenas en homenaje a dirigentes extranjeros.
«Se los presentará como presidente Clinton y expresidente Clinton», dijo Black, aunque estimó que «la oficina del protocolo presidencial, trabajando en conjunto con ellos, decidirá cómo rebautizar la Oficina de la Primera Dama».
En opinión de Black, «si ella estuviese casada con una persona que no ha sido presidente, sería el ‘primer caballero’, pero como Bill Clinton ha sido presidente, él pasará a ser el ‘expresidente’ y no el ‘primer caballero'».
– Un rol para Bill –
Tradicionalmente, las primeras damas estadounidenses, con sus propios equipos y su propio presupuesto, adoptan causas que no generen controversias.
Laura Bush, por ejemplo, se dedicó a difundir la lectura, Michelle Obama creó una huerta en la Casa Blanca para impulsar la alimentación sana, y Nancy Reagan se dedicó a hacer campañas contra las drogas.
Por el momento, Bill Clinton se ha limitado a bromear sobre el tema. «Ojalá yo pueda finalmente romper el sólido dominio que las mujeres tienen en el cargo de primera dama», dijo recientemente, desatando un coro de carcajadas.
Vegano desde 2010 a causa de problemas de salud, el expresidente no podrá recibir pagos por sus funciones en caso de que su esposa gane las elecciones, aunque nada impediría que actúe como asesor extraoficial.
Durante la campaña la propia Hillary llegó a bromear sobre el tema, cuando dijo que pretendía dejar a su esposo «con la responsabilidad de activar la economía, porque entiende de eso», en referencia al ‘boom’ que el país vivió durante su gestión.
Cuando Bill era presidente, su esposa Hillary se tornó el centro de una enorme campaña nacional para modificar el sistema nacional de salud, campaña que terminó en fracaso.