Biden dará su comparecencia un día después de nombrar a la vicepresidenta Kamala Harris para liderar la respuesta del gobierno a la situación en la frontera entre Estados Unidos y México.
WASHINGTON. — El presidente Joe Biden aplazó su primera conferencia de prensa para celebrar la aprobación del gigantesco paquete de ayuda para paliar los efectos económicos del coronavirus.
Pero seguramente estará presionado en la sesión de preguntas y respuestas del jueves sobre todo tipo de desafíos que han surgido desde entonces.
Un par de tiroteos masivos, el aumento de las tensiones internacionales, los primeros signos de divisiones dentro del Partido Demócrata y un número creciente de migrantes que cruzan la frontera sur enfrentan a una Casa Blanca conocida por su disciplina en los mensajes. Biden es el primer presidente en cuatro décadas en llegar a este punto de su mandato sin celebrar una sesión formal de preguntas y respuestas.
Se reunirá con los reporteros para el evento vespertino que se televisará a nivel nacional desde el Salón Este de la Casa Blanca.
“Es una oportunidad para que él hable con el pueblo estadounidense, obviamente directamente a través de la cobertura, directamente a través de todos ustedes”, dijo el martes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki.
“Y por eso creo que está pensando en lo que quiere decir, lo que quiere transmitir, dónde puede proporcionar actualizaciones y, ya saben, la oportunidad de interactuar con una prensa libre”.
Dará su comparecencia un día después de nombrar a la vicepresidenta Kamala Harris para liderar la respuesta del gobierno a la situación en la frontera entre Estados Unidos y México, donde la administración enfrenta un creciente desafío humanitario y político que amenaza con eclipsar la agenda legislativa de Biden.