El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llegó este sábado a Florida para hacer un reconocimiento de los daños causados por el huracán Idalia, una visita en la que probablemente no estará acompañado por el gobernador estatal, el republicano y aspirante presidencial Ron DeSantis.
Fueron recibidos, entre otros, por el alcalde de esta ciudad, Harvey Ward, tras lo cual el presidente y su esposa subieron a un helicóptero para hacer un recorrido aéreo sobre las zonas más impactadas por el ciclón Idalia, que el miércoles entró como un huracán mayor por el noroeste de Florida y luego atravesó los estados de Georgia y las Carolinas.
Posteriormente, se prevé que Biden ofrezca unas palabras con las que reafirmará su compromiso de ayuda hacia las poblaciones afectadas.
Todo parece indicar que entre los funcionarios federales, estatales y locales que se reunirán con el presidente habrá una notable ausencia: DeSantis, quien ha criticado de forma reiterada a Biden durante su campaña en las primarias republicanas para elegir al candidato en las elecciones presidenciales de 2024.
No obstante, este viernes Jeremy Redfern, portavoz de DeSantis, señaló que el gobernador no planeaba reunirse con el presidente, bajo el argumento de que “en estas comunidades rurales, y tan pronto después del impacto, los preparativos de seguridad por sí solos necesarios para organizar una reunión de este tipo pondrían fin a los esfuerzos de recuperación en curso”.
En respuesta a ello, la portavoz de la Casa Blanca Emilie Simons señaló que la visita de Biden ha sido planificada “en estrecha coordinación” con el personal de FEMA “así como con líderes estatales y locales para garantizar que no haya impacto en las operaciones de respuesta”.
Idalia causó daños devastadores tras tocar tierra, y dejó a cientos de miles de hogares sin luz, así como calles y muelles anegados con sus fuertes lluvias, vientos destructivos y marejadas ciclónicas.