ILE DE RE, FRANCIA.-Luego de someterse a pruebas de coronavirus que confirmaron estar bien de salud, el pelotón del Tour de Francia lidió el martes con una accidentado trayecto en la costa atlántica al reanudarse la carrera.
El sprinter irlandés Sam Bennett prevaleció en un embalaje ante el australiano Caleb Ewan para conseguir su primera victoria de etapa en un Tour.
La clasificación general no registró cambios, con el grupo de punta esquivando las múltiples caídas que marcaron la décima, u trayecto de 168,5 kilómetros (105 millas) entre le d’Oleron to Ile de Re.
El esloveno Primoz Roglic retuvo el maillot amarillo de líder general, manteniendo la diferencia de 21 segundos sobre el colombiano y defensor del título Egan Bernal. El francés Guillaume Martin marcha tercero, a 28 segundos del líder.
La primera jornada de descanso en la ronda gala fue dedicada para tomar 841 pruebas de diagnóstico a todos los 166 ciclistas y miembros de los equipos.
Cada uno de los corredores recibió el visto bueno para tomar la largada de la décima etapa.
Pero el director del Tour Christian Prudhomme tuvo que abandonar al dar positivo por el virus.
Otros cuatro empleados de equipos distintos también arrojaron positivo y fueron excluidos de la burbuja de la carrera. Bajos cielos soleados en el oeste de Francia, Stefan Küng y Michael Schar protagonizaron una madrugadora fuga.
En una ruta llana y expuestos al viento, los principales equipos acompañaron a toda velocidad al grupo de punta para cuidarse de los vientos cruzados, con lo que la brecha fue de menos de dos minutos.
El nerviosismo del pelotón afectó a varios corredores, como fue el caso de Robert Gesink y Nicolas Roche. Ambos se fueron contra el pavimento cuando pedaleaban a más de 55 kph.