Bogotá.- El expresidente colombiano Belisario Betancur, fallecido el viernes a los 95 años, fue despedido hoy en Bogotá en una ceremonia íntima en la que se le rindieron honores militares y a la que asistió el presidente Iván Duque junto con su gabinete.
Hasta el Gimnasio Moderno, lugar de las exequias, llegó el Batallón Guardia Presidencial que le rindió honores correspondientes a su dignidad, ceremonia a la que solo accedieron familiares, amigos y autoridades y a la que no se permitió el ingreso de la prensa.
Luego de realizado el oficio religioso en la capilla de los Santos Apóstoles un coche fúnebre condujo el féretro al cementerio Jardines del Recuerdo, en el norte de Bogotá.
Al velatorio, que se realizó en la Academia Colombiana de la Lengua, de la que Betancur era académico honorario, acudió hoy el fiscal colombiano, Néstor Humberto Martínez, quien destacó los vínculos de familiaridad con el expresidente, pues este asistió a los funerales de su padre, el humorista, actor y director de cine Humberto Martínez Salcedo.
“La amistad que trabó con mi padre, Humberto Martínez Salcedo, y su presencia en el entierro de él. Hoy venimos a rendirle un testimonio de gratitud y de solidaridad a la familia”, dijo Martínez.
También acudieron al velatorio antiguos empleados de la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, que trabajaron con Betancur cuando fue presidente, entre 1982 y 1986, y de quien destacaron su sencillez y trato familiar con ellos.
Algunos mostraron fotos en compañía de Betancur, que nació el 4 de febrero de 1923 en Amagá, municipio minero del departamento de Antioquia (noroeste).
También se hizo presente el sacerdote Diego Jaramillo, director del Minuto de Dios, una obra social que tiene una universidad y que con donaciones ha construida barrios para gente pobre en diferentes lugares del país.
Entre tanto, el presidente del Partido Conservador, Hernán Andrade, expresó una “profunda nostalgia” y resaltó de Betancur su lucha por la paz, la educación y la cultura.
Destacó que fue voluntad del expresidente “alejarse de todo el tema protocolario” y que “se quiso ir con la humildad que vivió.
Cero protocolos, siempre la humildad de su formación para que así fuera recordado». A las exequias también asistieron los expresidentes César Gaviria (1990-1994) y Juan Manuel Santos (2010-2018), al igual que exministros como Mauricio Cárdenas, Juan Camilo Restrepo, ambos del Partido Conservador, el mismo de Betancur, y el alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, entre otras personalidades de la política.
A las voces de pesar del exterior se sumó hoy la del rey de España, Felipe VI, quien telefoneó al presidente Duque para transmitirle su pésame por el fallecimiento del exmandatario. Betancur, muy cercano a España, país que le otorgó la nacionalidad, recibió el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en 1983 como reconocimiento a su participación en el Grupo de Contadora por la paz en Centroamérica.
El Gobierno de España destacó el sábado las contribuciones de Betancur a la búsqueda de la paz y el fortalecimiento de la amistad entre ambos países, así como su “talla intelectual” y “perfil humanista».
El exjefe de Estado colombiano también fue galardonado con el Premio Internacional Menéndez Pelayo (2007) y distinguido con las condecoraciones españoles del Collar de la Orden de Isabel la Católica y el Gran Collar de la de Carlos III.
El Gobierno colombiano decretó ayer tres días de duelo nacional para honrar la memoria de Betancur que incluye que el Pabellón Nacional esté izado a media asta en todos los edificios públicos del país y las embajadas de Colombia en el exterior.
El fallecimiento de Betancur ha sido muy lamentado no solo porque fue el primer presidente que intentó un acuerdo de paz con los grupos guerrilleros sino porque a diferencia de lo que suele suceder, se retiró de la política al concluir su mandato para dedicarse a la literatura y en las actividades intelectuales.