SANTO DOMINGO.-Conjugando elementos de la madre naturaleza, como musgo, piedras, arena, ramas y madera, con los que buscan reflejar la sencillez y humildad del nacimiento del niño Jesús, la familia Félix Jáquez ha hecho del pesebre una tradición que congrega desde 1990 a todos sus allegados.
Lo que inició como una inspiración en el primer belén que atribuyen a San Francisco de Asís en el año 1223, en Greccio, Italia, ellos quisieron representarlo de una manera real y sencilla para que la gente comprendiera mejor el misterio de la encarnación.
“Comenzamos a montar el belén en 1990, en nuestro segundo año de matrimonio, inspirados por una charla en la parroquia Nuestra Señora de la Altagracia. Ese año nació nuestro primogénito Aarón Yffar, y sentimos que era el momento ideal para hablarle de Dios de manera sencilla y visual.
Desde entonces, el belén se ha convertido en una tradición que cultivamos con amor y dedicación”, narró Felicita Jáquez.
Afirma que para ella y su esposo Rafael Félix Tejada, padres también de Moisés Román, Tobías Rafael, Daniel Josué y José Yizreél, la filosofía es que el belén sea un espacio de encuentro con la fe, que recuerde la humildad del nacimiento de Jesús y la esperanza del adviento.
De ahí, que procuran que cada figura transmita un mensaje: la obediencia de María, la protección de José, la adoración de los pastores y la entrega de los Reyes Magos, además de que el nacimiento sea una herramienta de evangelización y catequesis. Para ambos, la decoración navideña bajo el tradicional pesebre significa mucho más que un adorno; una expresión viva de fe y esperanza.

Papel, cartón, mazorca de maíz, barro y botellas plásticas son desechos reutilizables creación. Valor. Buscar que el nacimiento sea una herramienta de evangelización.La diferencia entre un belén tradicional y uno artificial está en los materiales y mensaje que transmiten. La creación puede ser en papel, cartón, hojas de mazorca de maíz, barro, botellas plásticas recicladas, madera o cualquier recurso que la imaginación permita.
Beneficio ambiental
— Reúso desechables
Para Felicita, el beneficio ambiental está en reutilizar y dar nuevo propósito a lo que podría convertirse en desecho, fomentando la creatividad sostenible; y cuidar la creación.