Todos los que siguen el béisbol han expresado en algún momento que lo mejor que le podría pasar a Bartolo Colón era el retiro, porque llegó un momento en que no podía sacar un out, estaba pasando vergüenza, agregado a esto, su avanzada edad influía en que todos pidieran que se fuera a casa a “criar gallinas o a engordar cerdos”.
Sin embargo, Colón se ha convertido, de un tiempo a esta parte, en un verdadero “tapa boca”, debido a que viene realizando en esta campaña una labor de primer orden, como en sus mejores tiempos.
Bartolo ya es, además, un verdadero espectáculo, porque nadie imaginaba que a los 45 años, “edad de pelotero”, era posible estar activo, con efectividad de 2.81 y récord de 2-1, que podría haber sido mejor si su equipo lo hubiese apoyado ofensivamente en varias salidas en las que perdió o salió sin decisión.
Su última actuación deja bastante claro que se convertirá este año en el lanzador latino más ganador, dado que está a ley de uno para empatar con su compatriota Juan Juan Marichal (243) y a tres de Dennis Martínez, latinoamericano con mayor cantidad de triunfos (245).
Además, el nativo de Altamira es un valor agregado para el equipo, porque son muchos los aficionados que se interesan en ir a los estadios para ver lanzar a un “anciano”, en términos deportivos.
De seguir más o menos dando esas demostraciones, que nadie dude que podría estar representando a Texas en el Juego de Estrellas, y si eso sucede, que se prepare para buscar unos miles de dólares a los médicos locales que le aplicaron las famosas células madre, lo que al parecer ha sido su salvación.
Todo parece indicar que mientras el hacha va y viene, es posible que sigamos viendo a Bartolo Colón accionar por lo menos en la campaña de 2019. Increíble, si eso sucede. Ojalá que así sea.