Rafael Molina Morillo, director de El Día
El lunes es, en realidad, un día muy pesado. Aunque, a decir verdad, quienes lo hacemos pesado somos nosotros mismos, porque todos los asuntos difíciles que se nos presentan a lo largo de la semana los vamos postergando “hasta el lunes próximo”, con sinceras ganas de que ese día no llegue nunca.
Es por eso que cada lunes amanece cargado de problemas de difícil solución.
Y debemos enfrentarlos con decisión, porque si nos descuidamos dos o tres días más y nos permitimos que el tema dure hasta el miércoles o el jueves, corremos el riesgo de volver a decir: “Bueno, eso lo vamos a resolver el lunes”.
Hoy, precisamente, es lunes, por lo que me ha parecido refrescante y estimulante transcribir algunas citas muy positivas que podrían ayudarnos a sobrellevar mejor las pesadeces naturales de este primer día de la semana. Veamos:
“Cuando negros nubarrones ensombrecen nuestros días, y nuestras noches aparecen más oscuras que un millón de medianoches, recordemos que existe una poderosa y benévola providencia en el universo capaz de abrir un camino donde no hay camino posible y de transformar un oscuro ayer en un luminoso mañana” (Martin Luther King).
“Si tú creas la noche, yo haré la antorcha. Si tú creas el barro, yo haré la taza. Si tú creas el bosque, la montaña y el desierto, yo haré los caminos, el jardín y el huerto” (Mohammed Iqbal, poeta hindú).
“Estamos formados y moldeados por nuestros pensamientos. Aquellos cuyas mentes están formadas por pensamientos altruistas reparten alegría cuando hablan o actúan.
El regocijo sigue tras de ellos como una sombra que nunca los abandona” (Buda).
“Dios, dame la serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, el coraje para cambiar las cosas que puedo alterar y la sabiduría para discernir la diferencia” (Benjamín Franklin).
Para comenzar la semana, estos pensamientos no están mal. ¡Feliz lunes, amigos!
