Los economistas prevén que Estados Unidos ha sumado 175,000 trabajadores a las nóminas en enero y que el salario promedio por hora aumentó 2,8 por ciento interanual.
Según el Departamento de Trabajo, la tasa de desempleo cerró enero en 4,8 %, una décima más que en diciembre, pero la economía estadounidense creó 227,000 nuevos empleos, muy superior a la estimada por los analistas, que anticipaban solo un alza de 180,000.
El plan del nuevo presidente Donald Trump de crear 25 millones de nuevos puestos de trabajo podría toparse con vientos desfavorables debido a la escasez de aptitudes.