Santo Domingo.-Nada impresiona más que recibir un obsequio con nuestro nombre, iníciales o monograma, porque al regalar buscamos agradar, y personalizarlo es la mejor manera.
Hoy en día el mercado ofrece decenas de formas y técnicas para identificar o marcar una pieza; el grabado a láser y el bordado son los más usados por la facilidad que ofrecen, así lo explican Valentín Soto Sanz, gerente de producción de Logomarca, y Ana Mercy Otáñez, gerente de la tienda de regalos personalizados El Bebé de Ana.
“El grabado siempre ha estado en boga por la delicadeza de su terminación, y el mismo se ha renovado convirtiéndose en una técnica muy útil para marcar e identificar artículos que van más allá de los promocionales, hoy puede trabajarse sobre materiales duros o blandos con el objetivo de fijar un mensaje, profundo o superficial para individualizar o adornar una pieza”, dijo Soto Zans.
Lo mismo ha pasado con el bordado, indica Otáñez, donde los avances tecnológicos y los programas especializados han hecho de esta manualidad un arte, que distingue, impresiona y da un toque de elegancia a las piezas del hogar e íntimas.
Soto Sanz dijo que gracias a los avances tecnológicos que existen para los grabados, estos pueden ser usados casi en todo tipo de materiales, y se trabaja bajo las técnicas de alto o bajo relieve, lo que permite crear artículos únicos para una persona o para un establecimiento comercial.
Mientras que Otáñez explicó: “Un regalo personalizado conmueve y causa la emoción que yo defino como: “tocar vida”, pues estos obsequios son imperecederos y al recibirlos hacen sentir especial y mimada a la persona que lo recibe, pues estos tienen una permanencia que hace valorar el esfuerzo y el detalle”.
