Un agente de policía murió y otro resultó herido este viernes a las puertas del Capitolio de Estados Unidos tras ser embestidos por un vehículo, dijo la policía de Washington D.C.
El Capitolio, sede del Congreso de Estados Unidos, y las calles de alrededor fueron cerradas al tráfico y al paso de personas.
La jefe interina de la Policía del Capitolio, Yogananda Pittman, informó en rueda de prensa que uno de los agentes no sobrevivió al ataque y que el sospechoso también murió.
El agente muerto fue posteriormente identificado por Pittman como William Evans.
«Con profunda tristeza les comparto la noticia de la muerte del agente William ‘Billy’ Evans esta tarde por las heridas sufridas durante un ataque en la Barricada Norte por un asaltante solitario», expresó Pittman en un comunicado.
Evans llevaba 18 años en la policía del Capitolio.
Según informa CBS News, socio de la BBC en Estados Unidos, el sospechoso era un ciudadano estadounidense.
Qué ocurrió
El incidente se produjo alrededor de las 13:00 hora local (17:00GMT).
El lugar exacto de la avenida Constitución donde el auto chocó contra la barricada es directamente el punto de entrada por el que llegan los senadores y su personal, según observadores en la zona.
Tras embestir a los policías, el sospechoso salió del auto con un cuchillo y en eso momento recibió los disparos que acabaron con su vida.
De momento no se reportó ningún vínculo con el terrorismo y el sospechoso no era conocido para la policía.
La oficina local del FBI en Washington está dando apoyo a la policía del Capitolio.
El fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, también está recibiendo actualizaciones constantes sobre el incidente, del que se desconocen los motivos.
«No parece que la amenaza continúe«, aseguró Pittman.
Congreso en receso
Imágenes de la zona mostraron un helicóptero sobrevolando lo que parecían ser dos personas en camillas siendo transportadas a una ambulancia.
El Congreso no estaba en sesión por las vacaciones de Pascua.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dejó Washington horas antes para ir a Camp David, el lugar de descanso presidencial situado en Maryland.
El Capitolio se encuentra fuertemente blindado desde el asalto del 6 de enero por una turba de seguidores del expresidente Donald Trump que dejó cinco muertos, aunque hace dos semanas se habían retirado parcialmente algunas de las vallas de seguridad.
Segundo ataque en menos de tres meses
Samantha Granville, periodista de la BBC en el Capitolio
El Capitolio lleva tres meses de tensión. Desde el ataque del 6 de enero el complejo ha sido una fortaleza con alambradas y un gran dispositivo de seguridad.
Menos de tres meses después, de nuevo estamos con los accesos cortados, con fuerzas de seguridad extra y con una sensación de preocupación y de solemnidad.
Los funcionarios con los que he hablado están felices por estar en casa ya que el Congreso está en receso, pero también nerviosos por tener que regresar tras las vacaciones de Pascua.
Asusta que ataquen dos veces tu lugar de trabajo, dicen.
Es preocupante que, aunque la seguridad haya aumentando, aún pueda suceder un incidente como este en el que ha muerto un agente.