Chris Dawson, de 74 años, fue declarado culpable de haber asesinado a su esposa, Lynette el pasado martes, por un juez de la Corte Suprema de Nueva Gales del Sur en Australia.
El caso permaneció sin resolver durante más de 40 años.
Chris, exjugador de rugby profesional, vivía con ella y los dos hijos de la pareja en Sídney.
Eran una familia aparentemente normal hasta que ella desapareció sin dejar rastro en enero de 1982. Tenía 33 años.
El caso permaneció sin resolver durante más de 40 años.
Hasta que el pasado martes, un juez de la Corte Suprema de Nueva Gales del Sur en Australia declaró a Chris Dawson, de 74 años, culpable de haber asesinado a su esposa, Lynette.
Chris, exjugador de rugby profesional, vivía con ella y los dos hijos de la pareja en Sídney.
Eran una familia aparentemente normal hasta que ella desapareció sin dejar rastro en enero de 1982. Tenía 33 años.
Allí se enamoró de una de sus alumnas adolescentes, Joanne Curtis, denominada JC en el juicio donde finalmente se alcanzó un veredicto sobre este intrigante caso.
La infidelidad
JC tenía solo 16 años cuando Chris se encaprichó con ella, según los detalles revelados tanto en el juicio como en el podcast de investigación de 2018 que desenterró el caso, The Teacher’s Pet («La mascota del profesor»).
Joanne formaba parte de una familia desestructurada, donde la violencia y el alcohol eran parte de la rutina diaria.
Pese a que la joven era menor, que él le doblaba la edad y estaba casado, el profesor entabló una relación estrecha con ella.
Chris contrató a la adolescente como niñera en su hogar e inició una relación secreta con ella.
Según el testimonio de JC durante el juicio, ambos tenían sexo a espaldas de Lynette cuando esta dormía o estaba en la ducha.
Chris Dawson estaba obsesionado con la adolescente, a la que quería como «reemplazo» de su esposa, según el juez Ian Harrison.
De hecho, solo tres días después de la desaparición de Lynette, la joven estudiante se había instalado en casa de los Dawson.
La desaparición
En los meses previos a la desaparición de su esposa, Chris estaba cada vez más desesperado porque habían fracasado sus planes de divorciarse y JC amenazaba con terminar su aventura, expuso el juez.
«Cuando el vínculo se convirtió en una relación sexual, Dawson se enfrentó a la cruda realidad de que no podía permanecer casado y, aun así, mantener su relación cada vez más intensa» con la adolescente, según el magistrado.
«La perspectiva de perderla lo angustió, lo frustró y, en última instancia, lo abrumó tanto que el señor Dawson decidió matar a su esposa», sentenció.
Chris Dawson niega haber matado a Lynette y siempre ha mantenido que ella los abandonó a él y a sus dos hijos, posiblemente para unirse a un grupo religioso.
La policía no ha encontrado un solo rastro de ella desde entonces.
Chris ha sostenido que su esposa lo llamó por teléfono días después de desaparecer para decirle que necesitaba un paréntesis en la relación.
A esa primera llamada, aseguró, siguieron otras, pero esto tampoco ha podido ser demostrado y el juez cree que es mentira.
La defensa del marido también alegó que al menos cinco personas testificaron haber visto a la desaparecida viva después de enero de 1982.
Esto tampoco convenció al juez, que consideró los avistamientos como errores de percepción de los supuestos testigos.
Dos años después de la desaparición de Lynette, en 1984, Chris Dawson y Joanne Curtis se casaron y tuvieron una hija.
La pareja se divorció en 1993.
El podcast
Dos investigaciones sobre la desaparición de Lynette en 2001 y 2003 concluyeron que estaba muerta y que habría sido asesinada por una «persona conocida».
Pero los fiscales no veían pruebas suficientes para presentar cargos, hasta que el periodista Hedley Thomas investigó el caso en su podcast.
Ganador del Walkley, el principal premio del periodismo australiano, The Teacher’s Pet acumula más de 60 millones de descargas y alcanzó el número uno en las listas de su país, y en Reino Unido, Canadá y Nueva Zelanda.
El podcast y su impacto sobre la opinión pública jugaron un papel clave en el arresto de Chris en 2018 y en el posterior proceso judicial.
El juez Harrison criticó su «visión poco balanceada» sobre el caso y dictaminó que había afectado a la evidencia provista por algunos testigos.
De hecho, la atención generada por el podcast llegó a provocar que se retrasara el inicio del juicio.
La defensa intentó incluso detener la causa al argumentar que su repercusión privaba al acusado de la oportunidad de un proceso justo.
Finalmente se determinó celebrar un juicio con juez en lugar de jurado popular, al considerar que este último sería más influenciable por la opinión pública.
El veredicto
El juez Harrison ofreció su veredicto el martes después de tres meses de juicio en los que se evaluaron evidencias aportadas por varios testigos.
Pese a que ninguna de las pruebas era concluyente en sí misma, tras evaluarlas en su conjunto el magistrado decretó que la culpabilidad de Chris Dawson era «persuasiva y convincente».
Descartó la versión sostenida por el acusado de que Lynette Dawson abandonó su hogar voluntariamente.
Valoró que la víctima «idolatraba a sus hijos y a su esposo» y que todas sus posesiones permanecieron en la casa conyugal tras su desaparición.
«Se hallaron incluso sus lentes de contacto en un contenedor azul, cuando el señor Dawson entregó sus pertenencias», alegó.
Además, desde que Lynette desapareció, ninguno de sus amigos y familiares tuvo noticias o algún indicio de que pudiera estar viva en algún lugar.
Considerando en su conjunto la evidencia circunstancial, el juez afirmó que «sin duda alguna» Chris mató a su esposa y se deshizo de su cuerpo.
Tras el veredicto, el culpable fue esposado y abandonó la sala sacudiendo la cabeza en señal de inconformidad.
La familia
Los familiares de Lynette Dawson presentes en el juzgado reaccionaron con lágrimas.
Su hermano, Greg Simms, declaró que la sentencia del tribunal solo confirmó lo que ellos ya sabían desde hacía años.
«Ella amaba a su familia y nunca los dejó por voluntad propia. Su confianza, sin embargo, fue traicionada por un hombre al que amaba», explicó a la prensa Simms, visiblemente emocionado.
También aludió a Chris Dawson, a quien pidió que «haga por fin lo que es debido» y «nos permita llevar a Lynette a casa para que descanse en paz, dándole finalmente la dignidad que se merece».
La sentencia se conocerá próximamente, en una fecha aún por determinar.
El abogado de Chris Dawson ha indicado que probablemente presentará un recurso de apelación.