El pasado sábado 5 de marzo se inició en la República Popular China (RPCh), la XIII Asamblea Popular Nacional (APN) y durará hasta el viernes 11 de marzo.
Para que se entienda la magnitud del asunto, es bueno recordar que la APN, es el más importante órgano de poder en China, el que ejerce el Poder Legislativo del Estado.
Sus miembros son elegidos cada 5 años en representación de las 24 Provincias, las 5 Regiones Autónomas, los 4 Municipios bajo Jurisdicción Central, las 2 Regiones Administrativas Especiales y las Fuerzas Armadas.
Esta vez contará con casi tres mil diputados y una mayor participación de trabajadores migrantes, obreros, campesinos, mujeres y jóvenes.
Es un órgano donde podemos identificar la democracia en China, porque ahí esta representado todo el pueblo, que es el que gobierna.
Esta vez la APN se enfocará, entre otros asuntos, en las reformas a su sistema político, comenzando por las reformas electorales necesarias para que el pueblo pueda expresarse.
A propósito, de esa augusta asamblea donde están representados los 1400 millones de chinos y de los temas que se están debatiendo, quiero aprovechar para dejar claro, y esto lo digo en mi calidad de politólogo o estudioso de la política, que en China también hay una democracia, que es la democracia popular.
No es exactamente la democracia electoral que existe en nuestros países, donde cada cierto tiempo se convoca al pueblo para que vote a favor del candidato que entienda, pero todos sabemos que el candidato que se impone es el que tiene más dinero, o sea plutocracia, para hacer una campaña.
No, la democracia de China se basa en la meritocracia y en el trabajo de servicio al pueblo por años de manera ininterrumpida.
Por eso me adhiero a estas palabras publicadas en el diario “Pueblo en Línea” de China. “La democracia no es un adorno, sino que se trata de resolver problemas a favor del pueblo.
Para entender si un país es democrático o no, es la práctica la que habla más alto y es donde la gente de ese país tiene una mayor voz.
La práctica ha demostrado que la democracia popular de todo el proceso en China es la democracia socialista más amplia, genuina y efectiva. Tiene sus raíces en la historia y la cultura nacionales, se adapta a las condiciones nacionales y es capaz de resolver los problemas de la nación.
Si bien no existe un modelo democrático único para todos y cada país puede abrir su propio camino, la democracia popular de todo el proceso chino enriquecerá la civilización política de la humanidad.” Adelante.