Un representante de Nordwind confirmó el arribo del avión, pero se negó a revelar quién lo alquiló, cuál es su carga o su itinerario.
CARACAS.-En un país inundado con rumores en medio de una crisis política en la que dos hombres se han proclamado presidentes de Venezuela, incluso el arribo inesperado de un avión ruso de pasajeros puede desatar frenesí en las redes sociales.
El Boeing 777, que pertenece a Nordwind Airlines de Rusia, aterrizó la noche del lunes y todavía se veía el miércoles en la pista de aterrizaje del aeropuerto Maiquetía, en las afueras de la capital, y provocó especulaciones no confirmadas de que el gobierno del presidente Nicolás Maduro quiere sacar del país lo que queda de las reservas de oro.
Un representante de Nordwind confirmó el arribo del avión, pero se negó a revelar quién lo alquiló, cuál es su carga o su itinerario. Se cree que es la primera vez que la aeronave va a Venezuela. Datos de vuelo muestran que suele volar al interior de Rusia y a Asia suroriental.
El legislador opositor José Guerra, ex director del banco central, dijo que fuentes de la autoridad monetaria le informaron que la aeronave fue alquilada para transportar 20 toneladas de oro, alrededor del 15% de las reservas en metálico en Caracas. “Queremos que esto se tome con mucha seriedad», dijo Guerra en la legislatura.
“Estas reservas no son de Calixto Ortega, estas reservas son del pueblo venezolano», agregó en referencia al presidente del banco central, cercano aliado de Maduro.
Associated Press no pudo verificar la autenticidad de las afirmaciones de Guerra. No hubo respuesta inmediata por parte del gobierno de Maduro.
Sin embargo, desde el inicio de la crisis, las redes sociales han estado saturadas de rumores o acusaciones imprecisas en relación a todo desde reportes de levantamientos militares que nunca se llevaron a cabo, hasta acusaciones de que las fuerzas de seguridad de Maduro están reclutando a adolescentes.
Rusia encabeza un grupo de adversarios de Washington que se ha pronunciado en defensa de Maduro y acusado a Washington de promover un golpe al apresurarse a reconocer a Juan Guaidó, el titular de la Asamblea Nacional controlada por la oposición, cuando se proclamó presidente encargado la semana pasada.
Guaidó y sus partidarios dicen que la constitución lo autoriza a asumir la presidencia interina y convocar a elecciones luego que Maduro asumió para un segundo sexenio tras elecciones que muchos consideran ilegítimas. Rusia es uno de los principales acreedores del gobierno de Maduro, al que provee de armas.
La empresa estatal Rosneft tiene fuertes inversiones en los campos petroleros venezolanos.