“ He arado en el mar y he sembrado en el viento”. Esta frase, llena de decepcionante amargura, se atribuye al Libertador Simón Bolívar al no ver unidos para siempre los países que formaron la Gran Colombia.
Salvando la gran distancia que separa este caso del de los nombres mal escritos de las calles y avenidas de nuestro Santo Domingo querido, nosotros, en cambio, no hemos arado en el mar ni sembrado en el viento.
En efecto, la vocera de los regidores del Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC) en el Distrito Nacional, doctora Thania Báez, ha solicitado al Concejo Municipal, a través de su presidente Winni Terrero, poner en la agenda para la próxima sesión el tema de la rectificación y corrección material del nombre y la rotulación de la calle Olof Palme, exprimer ministro sueco abatido a balazos en Estocolmo en 1986 y gran amigo del pueblo dominicano.
Asimismo, la indicada vocera pidió al Concejo que designe una comisión para evaluar, enmendar y rectificar otros casos de calles mal rotuladas.
¡Bien por la vocera Báez! Sigamos buscando errores con espíritu positivo.