Antonio Alma, Honoris Causa

Antonio Alma, Honoris Causa

Antonio Alma, Honoris Causa

Luis González

La Universidad APEC reconoció la trayectoria y la carrera extraordinaria al servicio de la educación de la República Dominicana al señor Antonio Alma.

Un hombre vinculado a las finanzas, por qué no decir a la política, a las actividades sociales, estuvo al frente de instituciones financieras privadas, pero también en el sector público, dirigió de manera extraordinaria el Club Deportivo Naco, y ha ha tenido una carrera exitosa al servicio de la República Dominicana.

Acción Pro-Educación y Cultura (APEC), de la cual de una u otra manera ha estado vinculado desde finales de los años 60, ha tenido una participación en sus principales instituciones, la universidad esa misma que hoy lo reconoce un Doctorado Honoris Causa, en reconocimiento de su trayectoria.

Si bien la forma, la actividad como tal para la cual fuimos convocados los amigos de Antonio Alma, el pasado jueves 29 de febrero, o sea, el reconocimiento fue extraordinario, el fondo, o sea, las palabras tanto del rector Franklyn Holguín Haché, como las palabras del mismo Dr. Antonio Alma, fueron extraordinarias dejando un mensaje primero del conocimiento que tienen de la situación global desde la óptica de un dominicano ubicado en el Caribe, en el mismo trayecto del Sol y sobre todo, de ciudadanos del mundo que aspiran a una mejor sociedad global.

A continuación, fragmentos te voy a citar porque no debe ser interpretados si no leídos textualmente porque no tiene ningún tipo de desperdicios del discurso del Dr. Antonio Alma.

“El cumplimiento de nuestro deber no puede ignorar que la lucha es interminable para alcanzar una sociedad y una nación cada vez mejor, dentro del concepto de perfectibilidad continua, para satisfacer las necesidades de un pueblo donde cada vez aspiran más personas y cada persona aspira más.

La lucha de hoy no es la ideológica entre capitalismo y comunismo de aquellos tiempos, ha sido sustituida por el sempiterno conflicto entre oriente y occidente, cumpliendo las predicciones del historiador británico Arnold Toynbee”.

También dice, “rentismo y especulación, que lleva a una industria de armamento a alentar guerras, para poder vender sus armas con miras a reemplazarlas por otras más modernas diseñadas con el enorme avance que ofrece la tecnología.

Así lo ha advertido el papa Francisco, con voz que parece clamar en el desierto. La era donde la emigración por insatisfacciones sociales y víctimas de convicciones religiosas la han convertido en armas políticas y de guerra.

Un mundo donde prospera el tráfico ilegal de sustancias, personas, armas y dinero; refugia en una delincuencia de cuello blanco, que encubre la delincuencia subterránea que opera en ciento de los países del mundo.

Un mundo complejo que solo puede encararse con nuevos liderazgos revestidos de convicciones humanistas, éticas, con disciplina, apego el orden y a la prudencia.

Un liderazgo que combata la corrupción que prospera en estos escenarios con frugalidad y templanza, para maximizar los resultados de los precarios recursos de los que disponemos. Enfrentar estos desafíos es nuestro reto de hoy”.
Bellas palabras con las que Antonio Alma asume su doctorado Honoris Causa. Adelante.