SANTO DOMINGO.-Sin importar que tiene ya más de dos décadas (21 años para ser exactos) como integrante de la selección nacional de voleibol femenino de mayores, la estelar centro Annerys Vargas confiesa que aun no ha pensado en el retiro como profesional del deporte de la malla alta.

Vargas, cuya primera incursión en el equipo nacional, denominado ahora ‘Reinas del Caribe’, aconteció en 1998, piensa que aun pude continuar aportando a los muchos éxitos que ha alcanzado el conjunto, actualmente ranqueado entre los mejores del mundo.

El actual ciclo olímpico concluye en los Juegos de Tokio el año próximo y Vargas, junto a sus compañeras, está concentrada en conseguir la tercera participación del sexteto tricolor en la máxima cita del deporte.

“No me ha pasado por la mente eso del retiro”, enfatizó Annerys. “Si mis condiciones físicas están como ahora, no tengo dudas de que continuaré hacia delante”.

Annerys ha estado presente en todos los triunfos importantes del equipo nacional, y asegura que su mayor satisfacción como atleta ha sido, además de los logros, “poder mantenerme por tantos años siendo una jugadora importante para la selección dominicana”.

“No ha sido nada fácil mantenerme en esta forma por tanto tiempo”, confiesa la espigada de 1,94 m (6’4) de estatura, cuyos primeros pasos los dio en el club del barrio Simón Bolívar, de la capital quisqueyana.

Santo Domingo 2003

Vargas ha ganado muchas medallas de oro con ‘las Reinas del Caribe’, pero no titubea un instante en afirmar que la que más le ha impactado fue la presea dorada lograda en los Juegos Panamericanos Santo Domingo 2003.

“Aquello fue espectacular”, dice Vargas. “Imagínense ustedes, mi primer gran evento con el equipo jugando aquí y recibiendo el calor de nuestra gente, fue grandioso”, dice.

— El secreto
Disciplina personal, incluyendo alimentación y descanso adecuado, han sido las claves que según Annerys Vargas le han permitido extender por tanto tiempo su carrera en voleibol de alta competencia.