SANTO DOMINGO.- A sus nueve años, Carlos Emmanuel empezó a agotar un programa de estudios pensado para adolescentes de 15 años.
Desafió el sistema, impuso su talento y tras haber agotado el programa de clases de banda rítmica (método para iniciar niños en la música), es un prometedor músico en formación.
Carlos encontró su oportunidad de desarrollo en el programa ‘Ángeles de la Cultura’, auspiciado por el Despacho de la Primera Dama que encabeza Cándida Montilla de Medina.
En siete años, dicha iniciativa ha impactado de manera directa a 8,437 niños y adolescentes de diez academias diseminadas en el Gran Santo Domingo, Santiago, Higüey y San Juan de la Maguana.
El grueso de este grupo proviene de sectores marginados en los que viven en condición de vulnerabilidad y cuyos padres no disponen de los medios para matricularlos en las academias de artes.
Influencia indirecta
Así que, de manera indirecta, ‘Ángeles de la Cultura’ ha impactado la vida de 25,463 personas, quienes son las integrantes de las familias de los infantes y quienes testifican del desarrollo integral que han experimentado los participantes.
“Este programa ha hecho que esos muchachos puedan aprovechar el tiempo en algo útil en vez de estar siendo mal influenciados en los barrios”, dijo Jean Carlos Rodríguez, padre de uno de los beneficiados.
El origen
La iniciativa se puso en marcha en febrero del año 2013. En ese entonces, Montilla de Medina expresó que se buscaba aprovechar el potencial infantil de los barrios y pueblos pobres del país estimulando su riqueza espiritual.
Declaró, además, que el proyecto constituía una gran oportunidad a través de la cual los niños y niñas podrían canalizar sus inquietudes artísticas.
La transformación
Freddy Ginebra, quien coordina el programa, catalogó de impresionante la transformación que experimentan los niños una vez que es instalada una de estas academias.
El cambio se expresa en un mejor rendimiento escolar, en disciplina en los hogares además de que elimina la exclusión social. Se han impartido clases de danza, literatura, música, pintura, teatro/títeres, banda rítmica, reciclaje artístico y coro.
Pero ,además de estas actividades, se hace énfasis en los valores tradicionales y universales, así como en los principios para que las personas sean formadas con dignidad.
Los cursos fueron impartidos por reconocidos profesionales del arte y la cultura que utilizaron locaciones en el Teatro Nacional, el Gran Teatro Regional del Cibao y el Palacio de Bellas Artes, así como colegios, escuelas y otros centros culturales. El porcentaje de jóvenes que no estudia y que no trabaja podría reducirse con esta y otras iniciativas similares en el nuevo gobierno.
—1— Continuidad
Aunque el Despacho de la Primera Dama será eliminado en la nueva administración gubernamental, programas como Ángeles de la Cultura ameritan ser continuados más allá del 16 de agosto.
—2— Promesa
Si bien Raquel Arbaje no asumirá un despacho, ha prometido involucrarse en actividades de corte social.