Hugo López Morrobel
Para sentir odio, debe haber existido una relación de amor, aprecio o cariño, que luego se siente “traicionado”, por diversas circunstancias.
El odio, de acuerdo a los sicólogos, es un sentimiento profundo e intenso de repulsa hacia alguien que provoca el deseo de producirle un daño o de que le ocurra alguna desgracia.
Otros con una visión distinta argumentan que es una especie de aversión o repugnancia violenta hacia una cosa que provoca su rechazo.
Para una persona tener un sentimiento tan repulsivo debe haber ocurrido un fenómeno extraordinario, como pasar de ser líder absoluto a caer en desgracia.
¿Qué hecho tan grande sucedió entre Tom Ricketts, propietario de los Cubs, y Sammy Sosa, quien se llenaba la boca, con toda la razón del mundo, de que esa ciudad se la dividían, “mitad-mitad”, él y Michael Jordan, máximo líder de los Bulls.
Ahora, tras varios años, Ricketts alega la supuesta relación de Sammy con los esteroides, cosa que ningún otro propietario a sacado a relucir con jugadores como Roger Clemens, Mark McGwire o Barry Bonds. ¿Cuál es la realidad de todo este revuelo que tiene en los medios el señor Ricketts?
