Amnistía Internacional (AI) condenó este miércoles los informes de una masacre ocurrida entre el 6 y 7 de diciembre en el barrio Wharf Jérémie en Cité Soleil.
Puerto Príncipe.- Amnistía Internacional (AI) condenó este miércoles los informes de una masacre ocurrida entre el 6 y 7 de diciembre en el barrio Wharf Jérémie en Cité Soleil, en la capital de Haití, donde un ataque de pandillas resultó en la muerte de 180 personas, según reportó la oficina del primer ministro del país.
“Instamos a las autoridades haitianas y a la comunidad internacional a redoblar sus esfuerzos para proteger a la población en el contexto de la crisis de seguridad”, dijo Amnistía en un documento. La directora para las Américas de Amnistía Internacional, Ana Piquer, pidió que los responsables de las “masacres” y “otras graves” violaciones de los derechos humanos deben ser “identificados lo antes posible y llevados ante los tribunales para responder por sus actos».
“La población de Haití merece vivir libre de miedo y de la violencia relacionada con las pandillas. Nos preocupa que puedan ocurrir más asesinatos a menos que se tomen medidas inmediatas para prevenir su repetición”, agregó Piquer. Pidió a la comunidad internacional actuar con “urgencia para apoyar a las autoridades haitianas en su obligación de proteger a las personas y garantizar justicia por estos atroces crímenes».
Amnistía Internacional también llamó a todas las pandillas en Haití a que cesen de “inmediato” los ataques contra la población. Una banda armada en la zona de Cité Soleil del área metropolitana de Puerto Príncipe cometió esta matanza después de que su líder, Micanor Altes, alias Wa Mikano (‘Rey Mikano’), supuestamente culpara a las víctimas de hacer brujería para que su hijo cayera gravemente enfermo. La mayoría de las personas asesinadas eran ancianos.
Desde 2018 hasta hoy, Haití ha sufrido más de treinta matanzas por los grupos armados que causan estragos en el país, que han costado la vida a cientos de personas, algunas de las cuales murieron quemadas, a las que hay que sumar las decenas de mujeres y niñas víctimas de violaciones colectivas.
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