Hay una lección política, aparte de consideraciones jurídicas, como corolario de la sentencia del Tribunal Constitucional declarando inconstitucional la resolución del Ministerio de Trabajo sobre cumplimiento del convenio con la OIT sobre trabajo doméstico.
Es lo que expertos en gerencia y gobierno de universidades de países desarrollados llaman, “alinear los patos” (to have your ducks in line), que se refiere a la carpintería política previa, imprescindible para asegurar la aprobación sin arrugas ni problemas de cualquier acción o medida.
Al presidente Abinader algunos funcionarios le han hecho un flaco servicio al no aprovechar las experiencias de gente que sabe cómo hacer fluir las cosas.
Los inexpertos convierten soluciones deseables en problemas indeseados. Pienso en cómo las EDEs y la tortuosa instalación de la necesaria barcaza turca opacan las inversiones en generación eléctrica; cómo la impericia retrasa solucionar el taponamiento del tránsito; o en los insondables fracasos en educación.
En cada caso la directiva desde arriba tropieza abajo, lo cual no ocurre en áreas donde la excelencia brilla, como Banco Central y Hacienda, Aduanas y DGII, Banreservas y Turismo, por mencionar pocos ejemplos.