Dilenia Cruz
Nos preparamos con optimismo a recibir un nuevo año cargado de promesas de mejores oportunidades que las obtenidas en este 2020.
Para estar mejor enfocados en las metas que nos planteemos para el 2021 es preciso estar conscientes de la importancia de nuestra salud física, mental y emocional.
En seguimiento a nuestro tema de “Una Buena Memoria” hoy quiero dejarles algunas recomendaciones alimenticias para nutrir el cerebro, lograr una mejor memoria y mejor enfoque en los temas que nos proponemos.
Es preciso recordar que a no ser que los médicos que nos tratan por alguna condición especial, recomienden limitaciones especiales, podemos consumir todos los grupos alimentos con moderación.
La variedad y calidad de los alimentos que consumimos también es importante para la salud del cerebro. Recordemos que este órgano es el centro de control desde donde se envían las órdenes al corazón para que se mantenga latiendo, a los pulmones que se llenen de aire y así a todo el organismo en su complejo proceso el cual ocurre sin siquiera darnos cuenta.
El perfecto funcionamiento del cerebro requiere grasas saludables (insaturadas) que están en las verduras, frutos secos, semillas y pescado; minerales como el zinc, el magnesio y el hierro los cuales están presentes en carnes magras, ostras, cereales enteros, frutos secos, pipas de calabaza, frutos secos, legumbres, vegetales de hoja verde y la soja, espinacas y carnes sin procesar como el hígado.
Las vitaminas del grupo B cumplen una significativa función en la salud del cerebro; junto al ácido fólico están relacionadas con las funciones cerebrales y enfermedades como la depresión según la Clínica Mayo.
De ahí la importancias de consumir diariamente productos ricos en vitamina B. Los carbohidratos también tienen su cuota en el buen funcionamiento del cerebro puesto que la glucosa es fuente de energía; al igual que para otras condiciones de salud los carbohidratos compuestos son los más beneficiosos.
Elige granos integrales. Los llamados antioxidantes son determinantes para mantener el cerebro en forma, y son fáciles de conseguir en las judías, zanahorias, fresas, moras azules (arándanos), manzanas, chocolate amargo y papas. Cuida tu memoria, cuidando tu cerebro a través de la alimentación balanceada y responsable.
