Manila.-Ayer se conmemoró el 40 aniversario de la “Thrilla en Manila”, el final de la trilogía de peleas entre Muhammad Alí y Joe Frazier.
Fue sin duda la última vez que el público vio a Alí en su mejor momento contra un competidor de primera.
Hoy se cumplen 35 años del que pudo haber sido el peor momento en el ring para Alí. En 1980, en la esquina de Ali se tiró la toalla por primera vez en su carrera en una pelea contra Larry Holmes.
El fuerte contraste entre el genial desempeño de Alí en Manila es uno de sus mayores logros y el retiro solicitado por la esquina ante Holmes casi exactamente cinco años después lo convierte en un interesante lapso de dos días en el alcance del legado de Alí.
Los dos combates
En 1975 Alí había peleado ante Frazier dos veces. Él perdió una decisión unánime en 15 asaltos en 1971 en el Madison Square Garden la primera derrota de su carrera -pero regresó y derrotó a Frazier en 1974 en el Garden.
En el combate decisivo, hecho en las Filipinas, Alí comenzó rápidamente en los dos primeras asaltos, pero Frazier golpeó incesantemente a Alí con golpes al cuerpo en un intento de detenerlo. Frazier fue más certero que Alí 191-163 en los primeros nueve rounds.
Golpes por asaltos
Desde los asaltos 10 al 14, Alí fue capaz de superar a Frazier 101-59. Frazier estaba cansado, y Alí siguió atacando.
De acuerdo al seguimiento de ESPN Stats & Info, Alí conectó 50 golpes en los dos últimos asaltos antes de que el entrenador de Frazier detuviese la pelea previo a lo que habría sido el asalto final.
En total, Alí conectó mejor que Frazier al ritmo de 264-250. La pelea fue designada como Pelea del Año por The Ring Magazine en 1975.
Alí contra Holmes
Alí ganó siete de sus próximas ocho peleas entre 1975 y 1978. Su única derrota fue contra Leon Spinks, de 24 años, en una decisión dividida de 15 asaltos.
Alí vengó esa derrota con una decisión unánime de 15 asaltos siete meses más tarde. Se convirtió en el primer peso pesado en ganar un título mundial en tres ocasiones separadas.
Se retiró en 1979.
En 1980 Alí había estado fuera del ring por más de dos años y se vio obligado a pasar un examen físico debido a las preocupaciones de salud y edad. Alí estaba en desventaja física y edad contra Holmes, y se notó desde temprano.
Holmes dominaba todos los asaltos de la pelea y consiguió aterrizar un total de 280 golpes ante Alí.
En el noveno asalto era claro que Alí no podía defenderse, pero la pelea continuó. Holmes aterrizó 46 y 47 golpes en los últimos dos asaltos antes que el entrenador de Alí, Angelo Dundee, lanzara la toalla.
Fin de un reinado
En retrospectiva, la importancia de la segunda pelea es que marcó el final del reinado de dominio de Alí. Aunque Alí peleó y perdió una vez más, su salud estaba en duda antes de entrar al combate ante Holmes y quedó severamente afectada después.
Fue diagnosticado con la enfermedad de Parkinson en 1984. Desde entonces se convirtió en un embajador deportivo por el mundo.
